Un alto exfuncionario del gobierno del ya fallecido Néstor Kirchner decidió colaborar con la justicia en la investigación por un escándalo de sobornos, convirtiéndose en el primer político que se acoge a la figura de «arrepentido» en la causa que también involucra a una veintena de empresarios.
Claudio Uberti, exdirector del organismo de concesión de obras viales durante el periodo de Néstor Kirchner (2003-2007), se entregó el lunes ante el fiscal Carlos Stornelli y rindió declaración este martes, quedando excarcelado por su colaboración.
El exfuncionario aseguró que tanto Néstor como Cristina Kirchner, quien le sucedió en la presidencia hasta 2015, estaban al tanto de los sobornos que se cobraban para adjudicar obras públicas, indicaron fuentes judiciales a la prensa.
El caso, conocido como «los cuadernos de la corrupción», estalló hace dos semanas e implica a una decena de exfuncionarios de los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner y a una veintena de grandes empresarios.
Cristina Kirchner acudió el lunes a los tribunales y pidió la recusación del juez Claudio Bonadio y del fiscal Stornelli, así como la nulidad de la causa.
Las denuncias parten de las anotaciones del exchofer Oscar Centeno, quien trabajó para el entonces viceministro de Planificación, Roberto Baratta.
En esos cuadernos, Centeno llevó una detallada bitácora de los recorridos que hizo durante diez años cargado de millones de dólares producto de los sobornos.
Pero la justicia requiere de más pruebas, por lo que promueve las declaraciones de los «arrepentidos», que hasta ahora habían sido solo empresarios.
Aunque inicialmente no figuraba entre las personas solicitadas por la justicia, Uberti fue mencionado por un exdirectivo de la empresa Techint, que poseía la mayoría accionaria de la siderúrgica venezolana Sidor, nacionalizada en 2008 por Hugo Chávez.
Uberti estuvo involucrado en un escándalo por el ingreso a Buenos Aires de una valija con 800.000 dólares supuestamente enviados por el gobierno de Hugo Chávez para contribuir a la campaña presidencial de Cristina Kirchner en 2007.
Ese caso nunca fue judicializado.
La valija fue traída a Argentina por el empresario venezolano-estadounidense Guido Antonini Wilson, con quien viajaba Uberti en aquella ocasión. El exfuncionario renunció entonces a su cargo.
Fuente: RFI