El 28 de octubre abrió sus puertas el XXVI Festival Internacional de Ballet de La Habana, que en esta edición rinde tributo al 70 aniversario de la fundación del Ballet Nacional de Cuba, y a los 75 años del debut de Alicia Alonso en el personaje de Giselle.
Al festival asistirán importantes figuras e instituciones de la danza mundial, entre ellos el ballet del Teatro Nacional de Praga, y el del Gran Teatro de Ginebra, entre otras importantes agrupaciones.
Según sus organizadores, desde España llegarán a La Habana la Compañía de Rafael Amargo, la Fundación Antonio Gades, y la destacada bailaora de flamenco María Juncal.
El Ballet Nacional de Cuba, que cumple el 28 de octubre 70 años de fundado, fue declarado Patrimonio Cultural de la Nación por ser la máxima expresión de la Escuela Cubana de Ballet, e incluye nombres imprescindibles como el de Alicia Alonso, considerada Prima Ballerina Assoluta, y los hermanos Fernando y Alberto Alonso.
En declaraciones al servicio informativo de la televisión local, Miguel Cabrera, historiador de la principal agrupación danzaría cubana aseguró que «pocas compañías en el mundo pueden mostrar un quehacer coreográfico como el que distingue al Ballet Nacional de Cuba –760 obras– (las dos últimas se estrenarán durante el festival), un repertorio muy grande que ha comprometido a 202 coreógrafos».
También se expresó la joven primera bailarina Gretel Morejón, quien piensa que la escuela cubana de ballet es una institución sólida, «que se lleva con mucha voluntad, con maestros increíbles, y sobre todo porque Cuba es un caudal de jóvenes virtuosos con muchas condiciones, lo que da lugar a que haya una cantera amplia».
Las sedes del XXVI Festival Internacional de Ballet de La Habana serán la sala Covarrubia del Teatro Nacional, el Mella, el Martí, y su sede permanente en el Gran Teatro de La Habana, y estará disponible una pantalla gigante en el capitalino Boulevard de San Rafael para que el público que no pueda asistir a la función inaugural pueda disfrutar la función de gala.