Con un 55,4% de las preferencias Jair Bolsonaro se convirtió este domingo en el presidente electo de la mayor potencia de América Latina. En su primer discurso el ultraderechista prometió que ‘cambiará el destino del país’.
Queda atrás una de las campañas más tensas y divididas de la historia del país sudamericano. Sin mayor incógnita el ex militar Jair Bolsonaro confirmó la tendencia y los sondeos y se quedó con el triunfo, con más de once puntos de distancia de su contrincante en esta segunda vuelta, el candidato del Partido de los Trabajadores, Fernando Haddad.
No sólo eso. En este domingo Bolsonaro también logró aumentar el número de sus votantes, si se compara con el 46% de los votos que recogió en la primera vuelta presidencial.
No es extraño que sus primeras palabras hayan sido de agradecimiento a ese electorado: ‘todos los compromisos que asumimos serán cumplidos.Muchas gracias a todos ustedes por el apoyo, por la consideración, por las oraciones y por la confianza’. ‘Juntos vamos a cambiar el destino de Brasil’, dijo Bolsonaro en una intervención transmitida a través de las redes sociales. También se comprometió a defender ‘la Constitución, la democracia y la libertad’.
Paralelamente miles de manifestantes se reunían frente a la casa del presidente electo en Barra de Tijuca, un exclusivo barrio de Río de Janeiro. Con frases como ‘el pueblo indignado habló’, los simpatizantes de Bolsonaro recordaban las que pueden ser las principales razones de este triunfo: el descontento hacia una clase política sumergida en casos de corrupción.
Del otro lado de la moneda, el candidato del PT, Fernando Haddad, reconocía el triunfo de su adversario y pedٌía respetar a sus votantes. ‘Tenemos una tarea enorme como país que es, en el nombre de la democracia, defender el pensamiento y las libertades de esos 45 millones de votantes que votaron por nosotros. Tenemos la responsabilidad de hacer oposición colocando los intereses nacionales, los intereses de todas y todos los brasileños por encima de todo’, decía quien reemplazará en la candidatura al ex presidente Inacio Lula Da Silva, luego que la justicia le prohibiera su regreso a la contienda política al estar encarcelado por corrupción y lavado de activos.
Fuente: rfi