Durante dos días, los asistentes tuvieron la posibilidad de capacitarse mediante charlas y talleres, donde optaron entre diversas temáticas para trabajar algunos aspectos prácticos.
“Unidos rehabilitando en comunidad” fue el nombre de la 4ta versión del Seminario de Rehabilitación y Discapacidad que desarrolló el estamento de Kinesiólogos, en conjunto con la Dirección Comunal de Salud y la carrera de Kinesiología de la Universidad Santo Tomás Los Ángeles.
En dos jornadas de trabajo, profesionales del área, además de terapeutas ocupacionales y fonoaudiólogos, pudieron conocer iniciativas destacadas que se ejecutan en este ámbito en los diferentes Centros de Salud Familiar (Cesfam) de Los Ángeles.
El seminario brindó también la posibilidad de que estudiantes de Kinesiología de Santo Tomás Los Ángeles presentaran proyectos de investigación en el área de rehabilitación, donde algunas tesis fueron seleccionadas para ello.
“La iniciativa incluyó charlas y talleres, en los cuales los asistentes tuvieron la oportunidad de escoger las temáticas y trabajar específicamente algunos aspectos prácticos”, detalló el director de la carrera de Kinesiología de Santo Tomás Los Ángeles, Claudio Soto.
Asimismo, el académico agregó que se trató de una instancia que forma parte de la política de vinculación con el medio impulsada por la casa de estudios y que, en este caso, apuntó a los profesionales del área de la salud de la comuna de Los Ángeles y la provincia de Biobío, creando instancias de capacitación y perfeccionamiento.
“INACTIVIDAD FÍSICA, SEDENTARISMO Y SUS EFECTOS EN LA SALUD”
Una de las exposiciones realizadas durante el seminario fue la del académico de la Escuela de Educación de la Universidad de Concepción, campus Los Ángeles, Rafael Zapata, y que llevó por nombre “Inactividad física, sedentarismo y sus efectos en la salud”.
Al respecto, Zapata sostuvo que lo invitaron a fin de poder contribuir, principalmente, desde el ámbito de la investigación en cuanto a actividad física, ejercicio y salud, transmitiendo la cantidad de beneficios que pueden ser percibidos en diferentes poblaciones en esta materia.
Ahora, “más específicamente, desarrollé un concepto que es bastante contemporáneo y que es la evaluación escolástica momentánea en el campo de la actividad física. Es una metodología que busca contribuir a comprender de mejor forma la conducta relacionada con la práctica del ejercicio físico en la población; sabemos que hay altos niveles de inactividad física en nuestro país y en el mundo, por lo que esta metodología podría ayudar a revertir este fenómeno”, explicó el expositor.
Para ello, agregó Zapata, será necesario considerar una serie de aspectos al momento de momento de diseñar estrategias o intervenciones para aumentar los niveles de práctica de actividad física, tales como el contexto de la persona, las características individuales, lo que viven a diario y cómo influye todo esto influye en que sea o no activa.
Al respecto, “un primer paso es que al momento de diseñar estrategias se valoren los aspectos de conductas de las personas, qué es lo que les limita a hacer ejercicios, cuáles son sus barreras, cuáles son sus compromisos y, a partir de ello, diseñar estrategias en base a sus posibilidades e intereses”, expresó el académico de la Universidad de Concepción.
De igual forma, añadió que en los países desarrollados las políticas públicas están muy comprometidas hacia una mejor calidad de vida, lo que también implica el ejercicio y la actividad física.
En el caso de Chile, “sin duda, deberíamos profundizar sobre este tema desde la aplicación, desde el ofrecimiento de programas y también desde el ámbito de la investigación; es necesario incorporar mayor investigación respecto a los contextos en los que se desarrolla la actividad física en la comuna, en la región, en el país para poder diseñar estrategias que nos permitan revertir el problema”, explicó Zapata.
Asimismo, agregó que es necesario profundizar en los intereses de las personas, conocer qué es lo que los limita, además de la falta de tiempo. “Las encuestas han valorado que la falta de tiempo es la principal excusa que entregamos los chilenos para no hacer ejercicio, pero debemos profundizar cómo distribuimos el tiempo y cuáles son los motivos reales, las barreras reales, que no nos permiten hacer actividad física; eso varía y fluctúa dependiendo de cada persona”, puntualizó el académico.
Si bien existen algunas recomendaciones mínimas entregadas por la Organización Mundial de la Salud e instituciones gubernamentales chilenas en cuanto a la cantidad de ejercicio que una persona debería realizar, Zapata expresó que mientras más se realice es mejor.
“Hay quienes no les gusta sudar, pero lamentablemente hay que hacerlo; es necesario hacer actividad física durante el día, todos los días. Eso va a contribuir a que cada persona tenga una mejor salud, ya que hay muchísima evidencia actual respecto a los beneficios que tiene una práctica de actividad física y de ejercicio”, finalizó Zapata.