BOGOTÁ – La Oficina de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) se mostró preocupada por las muertes de defensores de Derechos Humanos en Colombia, que suman 51 en los primeros cuatro meses del año.
por: Socio Informativo
Agencia de Noticias Sputnik
«En los primeros cuatro meses de este año, un total de 51 asesinatos de personas que posiblemente defendían derechos humanos o eran activistas han sido denunciados por la sociedad civil e instituciones estatales, así como por la Defensoría del Pueblo», dijo Rupert Colville, portavoz del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, según un reporte del organismo.
Asimismo, indicó que la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos en Colombia hace un seguimiento detallado a estos reportes.
«Esta altísima cifra continúa una tendencia negativa que se intensificó durante 2018, año en que nuestro personal documentó el asesinato de 115 defensores y defensoras de los derechos humanos», precisó el funcionario.
Colville destacó que estas violaciones de Derechos Humanos se han registrado con un «telón de fondo de estigmatización de defensores de los Derechos Humanos, especialmente contra aquellos que viven en zonas rurales».
«Estas regiones se caracterizan por una falta de servicios sociales básicos adecuados, altos niveles de pobreza, la existencia de cultivos ilegales, la presencia de grupos armados ilegales y de grupos criminales», dijo.
El funcionario precisó que los líderes comunales son «especialmente vulnerables» y que ellos representan más del 70% de los asesinados, algunos de los cuales fueron atacados por su apoyo a la implementación del Acuerdo de Paz firmado entre el Gobierno y la antigua guerrilla de las FARC en noviembre de 2016, y que contempla la restitución de tierras, sustitución de cultivos ilícitos y reconocimiento a las víctimas.
Por último, destacó la preocupación del organismo por las próximas elecciones locales que se celebrarán en octubre, ya que, consideró, «el número de ataques violentos podría aumentar incluso más».
Según la ONU, las muertes de líderes sociales en Colombia vienen en aumento desde 2015, cuando se registraron 41 casos, mientras que en 2016 un total de 61 activistas perdieron la vida de manera violenta y en 2017 se registraron 41 episodios, cifra que saltó a 115 homicidios en 2018.