La fuga de un líder del grupo criminal brasileño Comando Vermelho mientras era trasladado por la policía desató una crisis política en Paraguay que llevó al presidente, Mario Abdo Benítez, a remover al ministro de Justicia y la cúpula policial, así como abre la puerta para dar más poder al Ejército.
por Socio Informativo
Agencia de Noticias Sputnik
Jorge Teófilo Samudio, conocido como ‘Samura’, se encontraba detenido desde octubre de 2018, cuando fue capturado por integrar una banda dedicada al narcotráfico. El miércoles 11 de septiembre, el reo debía ser trasladado desde una dependencia del Poder Judicial hacia la cárcel de máxima seguridad de Emboscada, una localidad a 39 kilómetros de la capital Asunción.
Según reportó el diario La Nación, un comando de entre ocho y 12 delincuentes interceptó el convoy policial y, tras abrir fuego sobre los agentes, logró liberar a Samudio. En el asalto fueron baleados dos policías, entre ellos el comisario Félix Ferrari, quien falleció horas más tarde.
A raíz del caso, la Justicia paraguaya emitió una orden de captura internacional, ante la posibilidad de que el criminal liberado intente salir del país. Samudio es señalado como líder del grupo criminal brasileño Comando Vermelho, responsable del tráfico de grandes cantidades de droga hacia Brasil y Europa.
La fuga del criminal desató una crisis política e institucional en Paraguay, donde el crimen organizado es uno de los principales desafíos en materia de seguridad para el Gobierno de Abdo Benítez, quien asumió en agosto de 2018.
Sobre la noche del miércoles 11, el mandatario anunció a través de Twitter que había aceptado la renuncia de su ministro de Justicia Julio Javier Ríos. En la misma comunicación, informó su decisión de remover del cargo al comandante de la Policía Nacional Walter Vázquez.
La fuga motivó una investigación por parte del Ministerio Público, intentando establecer si el operativo de traslado de Samudio contaba con las medidas de seguridad necesarias. En ese sentido, el ministro del Interior Juan Ernesto Villamayor indicó que el director de la cárcel de Emboscada no había advertido a las autoridades sobre la peligrosidad del recluso ni sobre su posible vínculo con el Comando Vermelho y adelantó que se investigaría por qué no lo hizo.
Precisamente, que la fuga de Teófilo Samudio esté relacionada con corrupción interna es una de las preocupaciones del Gobierno paraguayo. En rueda de prensa este 12 de septiembre, Abdo Benítez expresó su dolor por el caso y reflexionó: «Nosotros le habíamos detenido a este delincuente, lastimosamente hubo dinero de por medio, una buena planificación se permeó dentro de las propias instituciones».
Tras remarcar que existe una «guerra frontal» contra el narcotráfico, el presidente anunció su intención de enviar al Congreso un proyecto de ley para ampliar las facultades de las Fuerzas Armadas, buscando que sean «protagonistas» del combate contra el crimen organizado.
«No podemos esperar más, tenemos una capacidad ociosa y esto tenemos que utilizar en favor del fortalecimiento de la política de seguridad», aseveró, según recoge la Agencia de Información Paraguaya.