RÍO DE JANEIRO – El ministro brasileño de Relaciones Exteriores, Ernesto Araújo, aseguró que Brasil es víctima de una conspiración mundial que le acusa de estar quemando la Amazonía, y que con ese pretexto se pueden justificar todo tipo de acciones, desde sanciones a intervenciones extranjeras.
por Socio Informativo
Agencia de Noticias Sputnik
«Claro que todo puede proponerse en relación a un país que está destruyendo el planeta: guerra, sanciones comerciales, etc. El hecho es que muchos, si no todos los pasos de ese raciocinio están equivocados», dijo el canciller, que aseguró que la deforestación sólo causa el 11% de las emisiones de gases de carbono y que en Brasil está detrás de menos del 2% de emisiones.
El ministro hizo estas declaraciones en Washington (EEUU) durante un discurso en la Heritage Foundation, una organización de corte conservador; previamente, dijo que tanto EEUU como Brasil son criticados porque están fuera del «pacto globalista» y porque cuestionan el dogma del cambio climático.
«El raciocinio es más o menos así: hay una crisis climática catastrófica, que se debe al calentamiento global, que se debe a las emisiones de gases de carbono, que se deben a Brasil quemando la Amazonía, así que vamos a invadir a Brasil, como propuso un artículo de la revista «Foreing Policy», criticó.
Araújo aseguró que el «climatismo», como él denomina a la supuesta ideología que intenta imponer la necesidad de luchar contra el cambio climático, quiere «acabar con el debate democrático» y crear el «equivalente moral de una guerra», para imponer políticas públicas y restricciones que van contra las libertades fundamentales.
El ministro brasileño de Exteriores es uno de los miembros más conservadores del Ejecutivo de Jair Bolsonaro y desde el principio ha remarcado su escepticismo respecto al calentamiento global, llegando a decir que el aumento de las temperaturas podría deberse a que los termómetros están demasiado cerca del asfalto en las ciudades.