CARACAS – Una fracción de la oposición venezolana y el Gobierno de Nicolás Maduro anunciaron una mesa de diálogo y firmaron un pacto para reformar el Consejo Nacional Electoral (CNE) y liberar a los políticos presos.
por Socio Informativo
Agencia de Noticias Sputnik
«Damos inicio a un proceso constitutivo de una mesa nacional por Venezuela, sus instituciones, su democracia (…) hemos adoptado los primeros acuerdos, que la fracción del PSUV [Partido Socialista Unido de Venezuela] vuelva a la Asamblea Nacional [parlamento unicameral de mayoría opositora] y se cumplirá de inmediato, que acordemos un nuevo CNE y se culminará en un breve plazo, que las libertades de quienes hoy están privados de ella sirvan al reencuentro y confiamos en que se cumpla», dijo el diputado opositor Timoteo Zambrano.
El documento se firmó en la sede de la Cancillería, en el centro de Caracas.
Entre los firmantes se encontraban el ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, y la vicepresidenta Delcy Rodríguez, así como dirigentes de los pequeños partidos opositores MÁS, Avanzada Progresista, Soluciones y Cambiemos.
«Hemos conformado una mesa nacional a fin de convenir acuerdos parciales, paso a paso, formada inicialmente por una delegación del Gobierno nacional y representantes de los partidos políticos Movimiento Al Socialismo (MAS), Avanzada Progresista y Cambiemos, además de personalidades de la vida política, académica y social de Venezuela», dijo el ministro de Comunicación.
En el documento que leyó Rodríguez, las partes hacen en un llamado al cese de las sanciones y del bloqueo por parte de Estados Unidos.
«Rechazar la aplicación de sanciones económicas contra el país, violatorias del derecho internacional y exigir el inmediato levantamiento de las mismas», agregó Rodríguez, también vicepresidente de Comunicación y Turismo.
En esta agenda no participan los partidos que enviaron una delegación al diálogo en Barbados, con la mediación del Gobierno de Noruega, que se desarrolló desde el pasado mes de mayo.
El diputado opositor Juan Guaidó, quien fue designado en enero presidente de la Asamblea Nacional y ese mismo mes se autoproclamó mandatario encargado, acusó el 15 de septiembre al Gobierno de Nicolás Maduro de abandonar el proceso de negociación propiciado por Noruega.
«Renovación del CNE, elecciones y separación del poder por parte de Maduro, libertad para presos políticos y garantías a los actores del acuerdo. Por eso abandonaron el proceso y tienen seis semanas escondiéndose», señaló Guaidó en declaraciones a la prensa.
El 15 de septiembre el principal facilitador noruego del proceso de diálogo, Dag Nylander, reiteró la disponibilidad de su país de continuar como mediador del diálogo, siempre que «las partes lo consideren oportuno y avancen en la búsqueda de una solución negociada».
Luego de la firma del acuerdo de este 16 de septiembre, el dirigente de Avanzada Progresista, Claudio Fermín, dijo a la prensa que es una coincidencia por el país y llamó a Guaidó a sumarse al proceso.
Además, aseguró que desconocía todo lo sucedido en las conversaciones propiciadas por Noruega.
Por su parte, el ministro Rodríguez explicó que en el documento se establecen propuestas para el envío de asistencia humanitaria y para un esquema de petróleo por alimentos, medicamentos y otros insumos esenciales, ante el bloqueo financiero de Estados Unidos.
Las partes también acordaron la defensa del territorio del Esequibo, disputado entre Venezuela y Guyana, luego de que este país anunció exploraciones petroleras en una zona en reclamación.
El acuerdo, luego de meses de enfrentamientos entre el Gobierno y la oposición, muestra nuevas divisiones entre los sectores contrarios a Maduro.