Un escándalo sacude a la Premier League inglesa y los involucrados son el Liverpool y el Manchester City, los dos equipos que dominan actualmente el campeonato.
Según ha revelado este sábado el diario británico The Times, el Liverpool tuvo que pagarle un millón de euros al Manchester City, que denunció que el sistema que usan sus ojeadores había sido pirateado.
Este acuerdo confidencial se produjo en septiembre de 2013 después de que se informó que el Manchester City descubriera el espionaje contratando a unos expertos informáticos para ver quién había corrompido sus documentos.
El suceso, considerado por The Times como “el mayor escándalo de mal comportamiento entre clubes de la historia de la Premier”, ocurrió un año después de que tres antiguos scouts del Manchester City se mudaron a Liverpool.
Las miradas están puestas en tres ojeadores que dejaron el equipo de Manchester para fichar por el Liverpool, entre los que se encuentra Michael Edwards, que actualmente es el director deportivo del club de Anfield. El City les ha acusado de acceder a su sistema “Scout7” en al menos un centenar de ocasiones sin permiso.
Para evitar mayores, se llegó a un acuerdo entre ambos equipos por el cual el Liverpool ha pagado un millón de libras al Manchester City en concepto de indemnización.