LA PAZ – Manifestantes opositores bolivianos tomaron los estudios principales de la radio y la televisión estatales, obligando a suspender los servicios informativos que estaban entonces concentrados en las protestas que demandan la renuncia del presidente Evo Morales, denunciaron ejecutivos y funcionarios de esas empresas.
por Socio Informativo
Agencia de Noticias Sputnik
«Manifestantes que habían cercado nuestros estudios nos retuvieron por unas dos horas, amenazándonos con destruir los equipos y cortar las emisiones si no suspendíamos nuestro trabajo periodístico», dijo el director de radio estatal Patria Nueva, Iván Maldonado, tras ser obligado a desalojar el edificio donde operan ambos medios.
Maldonado señaló que logró que los ocupantes desistan de provocar destrozos en los equipos a cambio de que ambos medios transmitan solo música en el caso de la radio y películas o documentales en la televisión, lo cual ocurría desde poco después de las 16:00 hora local (20.00 GMT), cuando concluyó el trabajo periodístico de ambos medios, sin explicaciones al aire.
Patria Nueva y la red estatal de Bolivia TV transmitían en cadena desde el 8 de noviembre una programación dedicada casi exclusivamente a cubrir la crisis política derivada del rechazo opositor a la reelección de Morales.
Los medios estatales BTV y RPN han sido intervenidos por grupos organizados que después de amenazar y amedrentar a los periodistas los obligaron a abandonar sus fuentes de trabajo. Dicen defender la democracia, pero actúan como en dictadura.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) November 9, 2019
Maldonado, quien era uno de los presentadores de esa cobertura, había denunciado antes de la ocupación de los manifestantes opositores que ejecutivos y periodistas de los medios públicos habían recibido amenazas para que cesen su trabajo y reveló además que activistas opositores habían logrado cortar las emisiones de Bolivia TV en Santa Cruz (este).
Periodistas de Patria Nueva divulgaron por su parte en las redes sociales grabaciones de llamadas telefónicas anónimas con amenazas de cierre si no dejaban de informar sobre los sucesos políticos.
Paralelamente, la televisora progubernamental Abya Yala anunció la suspensión de sus servicios de prensa tras denunciar que sus trabajadores habían sido agredidos por manifestantes opositores luego de asistir a una conferencia de prensa de sindicatos campesinos.