SANTIAGO – El académico de la Universidad de Santiago, Dr. Leonel Rojo, sostuvo que en el caso de que los proyectiles utilizados por efectivos policiales contengan plomo y no solo goma, como asegura un informe de la U. de Chile, pueden provocar una serie de complejidades si no se retiran a tiempo.
por Cristóbal Miranda Ríos
Usach al Día
El general director de Carabineros, Mario Rozas, descartó que los proyectiles utilizados por las Fuerzas Especiales de dicha institución, definidos como “munición no letal”, contengan plomo, como advirtió un informe emanado desde la Universidad de Chile. “Son de goma”, insistió.
Sin embargo, para el académico de la Facultad de Química y Biología de la Universidad de Santiago, Dr. Leonel Rojo, “a una corta distancia, el balín puede ser letal. Por ejemplo, a 3, 4, 5 o 10 metros, si es disparado en la cabeza”, sostuvo.
Sobre la base de las conclusiones del estudio de la Universidad de Chile, el especialista en toxicología señaló que la consistencia del plomo es muy densa y peligrosa desde el punto de vista químico.
“Si queda incrustado ahí y no se retira, puede provocar intoxicación, dolores articulares, problemas del apetito, dolores abdominales o de la cabeza o presión alta por intoxicación por plomo”.
Por lo tanto, el especialista llamó a que la institución policial deje de utilizar esta munición y se prohíba su uso, ya que la posibilidad de dirigir el objetivo de estos es mínima: “los proyectiles de la escopeta, al momento que se dispara, se dispersan en muchos ángulos”, precisó.
“Si el balín no se retira por completo, pueden quedar fragmentos y si esos fragmentos tienen plomo, pueden llegar a la sangre y causar problemas principalmente de debilidad, anemia o dolor, dependiendo de la concentración que alcance”, enfatizó.