Seguramente cada uno de nosotros está orgulloso de su país, de su historia y cultura. Sin embargo, no todos saben qué significa su nombre. La Razón te cuenta algunas teorías sobre el origen de los nombres de los países de América Latina.
Comencemos de norte a sur. La palabra México es la adaptación española del nombre de la capital del Imperio azteca en el idioma náhuatl, Metztlixihtlico. Este supuestamente se traduce como ‘el lugar en el ombligo de la Luna’. En particular, ‘mētztli’ significa la Luna, ‘xictli’ es ombligo o centro, mientras el sufijo ‘-co’ se usa para referirse a los lugares.
América Central
El origen del nombre de Guatemala no está del todo claro. No obstante, una de las teorías más populares afirma que también proviene del idioma náhuatl y significa ‘tierra de muchos árboles’ —’quauhtemallan’—. Otros suponen que puede haberse originado de la palabra ‘guhatezmalha’, que quiere decir ‘montaña que vomita agua’.
El Salvador tomó su nombre del fuerte español que estaba ubicado en el lugar de su capital, San Salvador.
La etimología del nombre del vecino de El Salvador, Honduras, puede referirse a las grandes profundidades de las aguas costeras de este país destacadas por los exploradores europeos.
El nombre de otro país centroamericano, Costa Rica, presuntamente fue elegido por Cristóbal Colón quien navegó a lo largo de estas costas durante su último viaje en 1502. Colón creía que esta zona estaba repleta del oro por lo cual, según se considera, calificó estas costas de ricas.
La etimología del nombre Panamá supuestamente tiene sus raíces en el idioma de los indígenas cueva, quienes habitaban la provincia actual de Darién, en el este del país cerca de la frontera actual con Colombia. El significado más aceptado comúnmente es ‘abundancia de peces’.
Caribe
Según una de las teorías, la isla más grande del archipiélago, Cuba, recibió su nombre del idioma de los indígenas taínos, quienes habitaban este grupo de islas antes de la llegada de los españoles. La palabra original ‘cubanacán’ puede ser traducida como ‘lugar del centro’.
La República Dominicana, ubicada en la isla La Española, deriva su nombre del fundador de la Orden de Predicadores —también conocida como ‘orden dominicana’—, Santo Domingo de Guzmán.
Estados Andinos
El nombre de Venezuela efectivamente significa ‘pequeña Venecia’. Así la llamó Amerigo Vespucci porque los palafitos —viviendas sobre estacas— que encontró en esta región le recordaron la ciudad italiana.
Colombia, por su parte, era conocida bajo el nombre Nueva Granada antes de 1863, cuando fue renombrada en nombre de Cristóbal Colón.
La siguiente, quizá, sea la etimología más obvia del continente entero. Ecuador se llama así porque el ecuador terrestre atraviesa la parte norte de este país andino.
En cuanto a Perú, el origen de este topónimo es bastante oscuro. Se considera que este puede derivarse de un idioma nativo, posiblemente preincaico. Según dicha teoría, este topónimo proviene del nombre del río Virú, igual que el nombre de una antigua cultura de esta zona. Varios especialistas creen que esta palabra puede ser traducida como ‘agua’ o ‘río’.
Bolivia también es un ejemplo de significado claro. Como ya muchos sabrán, esta tierra se nombró así en homenaje al libertador Simón Bolívar. El nombre original, aprobado en agosto de 1825, cuando la nación se independizó de España, fue República de Bolívar. No obstante, luego el diputado de Potosí, Manuel Martín Cruz, propuso la nueva versión al manifestar: «si de Rómulo, Roma; de Bolívar, Bolivia». La república adoptó este nombre de manera oficial a principios de octubre del mismo año.
Cono Sur
El país más grande del Cono Sur, Argentina, deriva su nombre del río de la Plata. La etimología está vinculada con la palabra ‘plata’ en latín —’argentum’—. El río de la Plata, por su parte, llegó a ser denominado así por la Sierra de la Plata, un lugar legendario supuestamente repleto de este metal precioso.
Chile, según una de las teorías, deriva su nombre del idioma de los indígenas mapuche con el significado ‘donde se acaba la tierra’ —’chilli’—. Otra teoría supone que el topónimo tiene sus raíces en el idioma quechua y significa ‘frío’ —’chiri’—. La etimología del nombre es bastante oscura de ahí que existen numerosas versiones de su origen.
El nombre Paraguay se origina por el río del mismo nombre y proviene de las palabras guaraníes ‘para’ —’agua’ o ‘río’— y ‘guay’ —’nacido’—, que puede estar vinculado con la tribu de los payaguaes, cuyo nombre significa ‘gente que vive a lo largo del río’.
Uruguay también es un hidrónimo. El nombre de este país proviene del río Uruguay y está compuesto de dos partes. La palabra ‘uru’, según algunas teorías, es del idioma de los indígenas charrúa y significa ‘ave’. La parte ‘guay’ es de la misma raíz guaraní que tiene Paraguay y significa ‘río’, es decir, Uruguay puede traducirse como ‘el río de los pájaros’.