El 29 de diciembre del 2019 el exdirector general de Nissan, Carlos Ghosn, se libró del arresto domiciliario al que había sido sometido en Japón huyendo a bordo de un avión privado rumbo a Beirut. Su enorme fortuna, estimada en 100 millones de dólares, podría haberle ayudado a evitar la Justicia japonesa.
Cinco sonados casos internacionales:
1- Marc Rich
El empresario de materias primas estadounidense Marcell David Reich —también conocido como Marc Rich— desarrolló un esquema con el que comerciar con petróleo violando las sanciones impuestas a Irán después de la crisis de los rehenes del país persa (1979).
En 1983 el empresario estadounidense huyó a Suiza cuando el fiscal Rudy Giuliani le imputó en más de 60 cargos penales, entre los que se incluían fraude electrónico y postal, evasión fiscal, crimen organizado y violación de embargo.
Tras escapar de la justicia, Rich continuó su negocio fundando la empresa Glencore, que en la década de 1990 casi acorraló al mercado soviético de petróleo, de cobre y de níquel. Esta expansión le ayudó a acumular una fortuna de 1.000 millones de dólares para finales del siglo XX.
2- Thaksin Shinawatra
A mediados de la década de 1990, el empresario tailandés Thaksin Shinawatra logró atesorar una fortuna de diez dígitos al frente de la empresa Shinawatra Computer & Communications. En 2001 el empresario llegó a ocupar el cargo de primer ministro de Tailandia en busca de más influencia política. Cinco años más tarde se aprovechó de una enmienda legislativa para poder vender su empresa a una compañía singapurense. El movimiento propició una masiva protesta pública que acabó con un golpe militar.
Posteriormente la Corte Suprema de Tailandia le sentenció a dos años de prisión por corrupción. Le acusaron de haber utilizado su influencia política para hacerse con una parcela de tierra adquirida por su esposa a un precio inferior al del mercado. Además, fue imputado por crímenes que supusieron penas de prisión más largas.
Cuando Shinawatra abandonó el país, su riqueza ascendió a 1.900 millones de dólares gracias a sus operaciones inmobiliarias. Tras haber encontrado cobijo en Dubai, Thaksin prometió defenderse de los cargos presentados en su contra hasta sus últimos días.
En 2011, su hermana Yingluck Shinawatra —que había ocupado el puesto de primera ministra— se vio involucrada en varios escándalos y tuvo que abandonar su cargo. La corte la sentenció a cinco años de prisión por negligencia ya estando a la fuga. Actualmente, Yingluck Shinawatra, al igual que su hermano, vive en el exilio en Dubai.
3- Joseph Lau
Tras haber finalizado sus estudios en la Universidad de Windsor (Canadá), este multimillonario hongkonés regresó a su país natal y se unió al negocio familiar: la producción de ventiladores de techo. Posteriormente el empresario fundó la empresa Evergo, y más tarde pasó a realizar operaciones inmobiliarias y a dedicarse al negocio hotelero.
En 2014, un juzgado de Macao le acusó tras huir del país de haber sobornado a un funcionario. Este crimen le permitió hacerse con el control de un pedazo de tierra situado cerca del aeropuerto, escribe la revista Forbes.
Actualmente, Lau continúa escondiéndose de la justicia en Hong Kong, región que no mantiene tratado de extradición alguno con Macao. En 2015 el empresario compró dos enormes diamantes de 12 y 16,1 quilates para su hija de 7 años valorados en 77 millones de dólares.
4- Guo Wengui
Antes de convertirse en magnate inmobiliario, Guo Wengui trabajó como funcionario público en la provincia china de Shandong. En 2015 poseía una fortuna estimada en 1.100 millones de dólares.
El empresario fue acusado de sobornar a un funcionario del Gobierno de China para que le ayudase a conseguir la participación mayoritaria en la empresa de corretaje Minzu Securities. Sus acciones en la compañía Founder Securities —su principal fuente de riqueza— fueron congeladas en enero del 2015 antes de que huyera a EEUU por temor a las acusaciones de corrupción.
Tras huir de China, el empresario pagó discretamente en efectivo unos 67 millones de dólares por un enorme apartamento en el hotel Sherry-Netherland de Manhattan.
Actualmente, Guo continúa defendiendo firmemente su inocencia y utiliza con asiduidad las redes sociales para publicar alegaciones sobre crímenes relacionados con la corrupción y cometidos en las más altas instancias del Gobierno chino. Guo atrajo la atención de los medios cuando pasó a ser miembro de un club situado en la residencia de Donald Trump en Mar-a-Lago. Además, tiene un litigio con WarnerMedia, empresa a la que acusa por haberle difamado en la CNN al asegurar que era un espía chino.
5- Serguéi Pugachov
En 2008 este multimillonario ruso poseía una riqueza estimada de 2.000 millones de dólares. Pugachov fue el propietario del Banco Industrial Internacional, entidad que más tarde se declararía en bancarrota. En octubre del 2010, el Banco Central de Rusia le retiró su licencia.
Desde el principal regulador financiero ruso comunicaron que el Banco Industrial Internacional aplicaba una política financiera arriesgada y que presentaba una contabilidad incorrecta. En enero del 2011 el Comité de Investigación de Rusia abrió una causa penal acusando a la administración del banco de haberse declarado en quiebra intencionadamente para evitar pagar sus deudas.
Más tarde, Pugachov abandonó Rusia rumbo a la ciudad francesa de Niza. Se cree que el empresario y otras dos personas desviaron con ayuda de una empresa los 32.500 millones de rublos —más de 532 millones de dólares — que habían sido otorgados por el Banco Central de Rusia al Banco Industrial Internacional como crédito.