En el contexto de un nuevo llamado a movilizaciones el lunes 10 de febrero, en la comuna de Antofagasta, una locomotora del FCAB (Ferrocarril Antofagasta Bolivia) fue incendiada por un grupo minoritario, que se alejó de la marcha.
Pasadas las 21 horas del reciente lunes, en Antofagasta, fue incendiada una locomotora del Ferrocarril Antofagasta Bolivia (FCAB), perteneciente al grupo Luksic, hecho que fue difundido por diversos medios regionales y nacionales.
La acción- que aún está en proceso de investigación y que ya cuenta con una persona detenida- habría sido realizada por un grupo minoritario de personas, en el contexto de una nueva movilización en la ciudad.
El hecho fue respondido desde la Gerencia de FCAB y también por parte del magnate Luksic, quien a través de sus redes sociales manifestó que “Nada justifica que la vida de dos personas y la seguridad de una ciudad entera se pongan en riesgo. Chile necesita avanzar y con violencia eso nunca podrá ocurrir !!!” .
Nada justifica que la vida de dos personas y la seguridad de una ciudad entera se pongan en riesgo. Chile necesita avanzar y con violencia eso nunca podrá ocurrir !!! pic.twitter.com/hyVLJ1NYao
— Andrónico Luksic C. (@aluksicc) February 11, 2020
Ante esto, Francis Astudillo, dirigente del Sindicato Interempresa del FCAB, afirmó que “no compartimos los métodos descolgados de supuestos manifestantes, ni hablar si son carabineros infiltrados como hemos vistos en otros casos, pero quiero ser muy enfático: los ferroviarios no nos vamos a prestar para los juegos mediáticos de Luksic”.
Al ser consultado el dirigente sobre los dichos de Luksic y la preocupación que expresa el empresario hacia las y los trabajadores, a través de sus redes sociales y de manera constante, Astudillo criticó duramente que “ahora los Luksic, dueños del Ferrocarril y del monopolio de la contaminación en la ciudad, se preocupan de la seguridad y la vida de los trabajadores. ¿Y qué pasó cuando tuvieron más de 26 horas trabajando a un grupo de compañeros del área de Ingyser?, ¿cuando llovían reclamos por los turnos inhumanos?, ¿qué pasó cuando tiraban a la gente a la calle y se lavaban las manos con el Multirut?, ¿o cuando se les dijo una y mil veces que los pisos ferroviarios contenían plomo acumulado sin ninguna medida sanitaria real, tal cual hicieron con el puerto?”, denunció el dirigente.
“Los trabajadores ferroviarios hemos aguantado muchos años de abusos, malos tratos, turnos inhumanos, discriminación y divisiones arbitrarias con el famoso Multirut, y persecución a los dirigentes que se atreven a levantar la voz; además de la contaminación permanente a nosotros y nuestras familias, una crítica y grave situación que es denunciada por el conjunto de la población de Antofagasta. A 114 años de la matanza en Plaza Colón, nos damos cuenta que no han cambiado muchas cosas, que la precarización del trabajo se mantiene al igual que las exorbitantes ganancias empresariales de grupos como Luksic. Pero, con el despertar de Chile y de muchos de nosotros, trabajadores, trabajadoras, pobladores, vemos que podemos cambiar esta realidad que ya no queremos, que podemos luchar por una sociedad al servicio de nuestras necesidades y donde ya no exista precarización, ni mecanismos como el subcontrato o el Multirut”, afirmó Astudillo.
Sobre lo último mencionado por el trabajador ferroviario, cabe mencionar que después de casi dos años desde que el Sindicato Interempresa FCAB demandó al grupo Luksic, la Corte Suprema sentenció que sí existe el Multirut en dicha empresa, lo que fue catalogado como un punto de apoyo importante en esta pelea dada por trabajadores: “el Multirut es un mecanismo de “negocio” que ha jugado un rol adverso para las condiciones laborales, previsionales y sindicales contra las y los trabajadores durante estos últimos 30 años de administración de la herencia de Pinochet por parte de los Gobiernos de la vieja concertación, ex Nueva Mayoría y la derecha, dividiendo brutalmente la fuerza de la clase obrera, y en este caso el de los ferroviarios”, denunciaron hace unos días desde la Agrupación 6 de febrero.