SANTIAGO – Los doce carabineros a los que se les imputó el delito de torturas en contra de Moisés Órdenes en Plaza de Ñuñoa el pasado 21 de octubre, en el marco de las manifestaciones sociales, serán reformalizados por la fiscalía, que les imputará dos nuevos delitos.
Según la fiscalía, los uniformados no solo incurrieron en torturas contra Moisés Órdenes, también adulteraron el documento con el cual quisieron justificar la detención de la víctima.
Los casos de corrupción, torturas, mutilaciones y asesinatos por parte de carabineros no cesan. Este caso en particular logró altos niveles de difusión, debido a que la golpiza propinada por estos policías pertenecientes a las fuerzas especiales, fue transmitida por un canal de TV, no dejando espacio a dudas sobre el delito de tortura en que incurrieron.
Ahora el ministerio público Formalizará a los 12 imputados, esta vez por los delitos de falsificación de instrumento público y de obstrucción a la investigación.
Esta práctica no es de ninguna forma un caso aislado, los montajes, ocultación de pruebas y manipulación de instrumentos públicos son una práctica anquilosada en la institución, cuestión que ha sido develada en múltiples ocasiones por los tribunales de justicia, como en la Operación Huracán, en los asesinatos de Camilo Catrillanca, Alex Lemun, Matias Catrileo, Jaime Mendoza Collio y muchos otros casos donde ha quedado en evidencia el actuar delictivo de carabineros.