BOGOTÁ (Sputnik) — El general retirado del Ejército de Venezuela, Clíver Alcalá Cordones, quien desde hace dos años residía en Colombia y por quien EEUU ofreció una recompensa tras señalarlo de ser parte de una red narco-terrorista vinculada con el Gobierno venezolano, se entregó a la Administración para el Control de Drogas (DEA).
«Alcalá se entregó en la ciudad de Barranquilla (norte, donde residía) y desde allí fue enviado a las 4:30 de la tarde (21.30 GMT) de este viernes a Estados Unidos en un avión de la DEA», publicó el diario local El Tiempo con base en fuentes que no reveló.
Las autoridades colombianas permitieron la salida de Alcalá del país pese a la suspensión de la operación aérea internacional que decretó el pasado 23 de marzo para hacerle frente al nuevo coronavirus (causante de la enfermedad covid-19), que ya suma 539 casos y deja seis fallecidos en el país.
El diario indicó, con base en información de su fuentes, que Alcalá se declaró sorprendido luego del señalamiento que hizo EEUU el jueves en su contra y ofrecer una recompensa por él, ya que, habría dicho, «estaba planeando un golpe de Estado contra Nicolás Maduro con armamento que fue incautado por la Policía (el pasado lunes) en la vía Barranquilla-Santa Marta».
Alcalá dijo en días pasados ante la prensa colombiana que el arsenal incautado (compuesto por 26 fusiles de asalto AR-15, sin marca ni serie, junto a otros elementos de guerra) era de su propiedad y que fue comprado por el líder opositor venezolano Juan Guaidó para una «operación» contra el presidente Nicolás Maduro.
«Ni siquiera Guaidó sabía de la operación, él solo tenía que saber el objetivo, porque todas las operaciones habían fracasado por filtraciones de ese entorno corrupto de la política venezolana; ni el presidente (de Colombia, Iván) Duque ni las autoridades de inteligencia, ellos se informaron directamente por mi persona hace 48 horas, pero ya era tarde», dijo Alcalá el jueves a la emisora W Radio.
Clíver Alcalá, quien fue mayor general del Ejército de Venezuela, colaboró con el expresidente Hugo Chávez (1999-2013) durante el intento de golpe de estado liderado por éste en febrero de 1992, pero se encontraba en el exilio debido, según él, a diferencias con Maduro.
Según Estados Unidos, Alcalá, haciendo uso de su rango militar, coadyudo a la conformación del Cartel de los soles, el cual envió miles de toneladas de droga a EEUU.
El jueves, el Departamento de Estado de Estados Unidos y la Fiscalía de ese país acusaron de narcotráfico y terrorismo al presidente Maduro, por quien oficializó una recompensa de 15 millones de dólares.
Además de Maduro, EEUU también acusó al número dos del oficialismo venezolano, Diosdado Cabello; al vicepresidente encargado de Economía, Tareck El Aissami; al ministro de Defensa, Vladimir Padrino, y al presidente del Tribunal Supremo de Justicia, Maikel Moreno.
La acusación también involucra a los militares retirados Hugo Carvajal, exjefe de la inteligencia militar de Venezuela, y a Alcalá Cordones, por quienes EEUU ofreció en total 55 millones de dólares.