El alcalde de Recoleta «Daniel Jadue» le planta cara al fantasma del comunismo come-bebés

SANTIAGO — El pasado 17 de julio se encendieron las alarmas de conservadores, moderados y derechistas chilenos. El alcalde de Recoleta Daniel Jadue, manifestó su disposición a aparecer en la papeleta de las elecciones presidenciales del próximo año, aspirando a convertirse en el primer presidente comunista de Chile.

La noticia causó sorpresa en todos los sectores debido a que aún queda más de un año para el proceso electoral y muchos habían pedido no adelantar la carrera presidencial en medio de la pandemia del coronavirus. Y aunque el alcalde del Partido Comunista señaló posteriormente que aquello no fue un lanzamiento formal de su candidatura, para todos los efectos se entendió así.

Pero el anuncio no sólo remeció a la derecha, sino que también al ala más conservadora de la oposición.

Figuras importantes del sector como el presidente del Partido Por la Democracia (centroizquierda), Heraldo Muñoz, señalaron que la figura de un comunista como Jadue podría polarizar los extremos en el país. Y golpe más profundo lo propinó Carmen Frei, militante del Partido Demócrata Cristiano (centroizquierda), hermana del asesinado expresidente Eduardo Frei Montalva (1964-1970) y destacada defensora de los derechos humanos.

«Chile no está preparado para un presidente comunista», sentenció Frei en seco, durante una entrevista con CNN Chile.

Durante una emisión de «Estado Nacional» en 2017, un emblemático programa político de la televisión chilena, el alcalde Jadue llegó con una bolsa de «guagüitas», unas tradicionales golosinas chilenas con forma de bebés, y las comenzó a repartir entre los panelistas. «Para los que aún creen que los comunistas comemos bebés», ironizó.

Este fue uno de los tantos rumores que difundió la derecha chilena a comienzos de la década del 50 en plena Guerra Fría, cuando el Partido Comunista fue proscrito y sus militantes fueron borradores de los registros por el expresidente Gabriel González (1496-1952) y que resurgieron durante la dictadura del fallecido Augusto Pinochet (1973-1990), quien fue más allá y ordenó el asesinato de más de 3.000 opositores.

Clima de odio

Camilo Sánchez, presidente de las Juventudes Comunistas de Chile, explicó que durante años se cultivó un clima de odio contra los militantes del partido. «Tanto la derecha como algunos sectores de la centroizquierda se han dedicado a descalificar a los comunistas, porque somos los rivales del modelo neoliberal que ellos apoyan».

«Se nos tilda de ultrones (radicales) y de extremistas, de que dividimos al país, pero nosotros nunca nos hemos visto involucrados en ninguna operación que limite el carácter democrático de la nación», retrucó, haciendo referencia al Golpe de Estado de 1973.

Jadue es nieto de una familia de migrantes palestinos que llegó desde Bait Jala, una localidad cerca de Belén, a Recoleta, una comuna popular del sector norte de Santiago de Chile. Durante su juventud, Jadue se vinculó al Frente Popular para la Liberación de Palestina, una organización panarábica marxista-leninista fundada por George Habash en 1967, forjando su ideología actual.

Estas ideas, y su posterior resistencia a la dictadura de Pinochet, lo llevaron a entrar a las filas del Partido Comunista de Chile en 1993, desde donde inició una carrera política que lo posicionó en la actual alcaldía de Recoleta.

Iniciativas

Desde esa palestra, se hizo conocido por sus iniciativas innovadoras.

En 2015, cuando se conoció que las tres principales cadenas de farmacias privadas en Chile estaban coludidas para subir sus precios, Jadue implementó la Farmacia Popular, vendiendo medicamentos a menos de la mitad de su precio. Hoy, las farmacias populares están en casi todas las municipalidades importantes del país.

Asimismo, creó la óptica popular, la inmobiliaria popular, la librería popular, el dentista popular, la universidad abierta, y otras medidas de esta índole.

Además, durante las protestas del estallido social de octubre pasado, Jadue fue uno de los pocos políticos que marchó en la calle junto a la ciudadanía en contra del modelo neoliberal y la gestión de Piñera. Debido a esto, todas las encuestas de opinión lo sitúan como la principal carta de la oposición para suceder a Sebastián Piñera en el cargo.

En 1969, el premio nobel de Literatura, Pablo Neruda, fue el precandidato comunista a la presidencia de Chile, pero renunció para apoyar al expresidente Salvador Allende (1973-1990). En 1999, la hoy fallecida dirigente comunista Gladys Marín fue la primera mujer en competir por llegar a ser presidenta del país, pero sólo sacó el 7 por ciento de los votos.

Hoy, por primera vez en sus 108 años de historia, el Partido Comunista aparece liderando las encuestas de candidaturas presidenciales, y sus militantes no están dispuestos a dejar pasar esta oportunidad, aunque moleste a conservadores, moderados y derechistas.


Por Francisco Bravo Atias – Corresponsal en Chile de Sputnik desde 2017. Anteriormente trabajó en los diarios La Segunda y El Mercurio. Graduado de periodismo de la Universidad Diego Portales de Chile