SANTIAGO — Un atolondrado mecánico se acercó donde una conductora que tenía el auto averiado, al costado de la calzada. En un inconfundible dialecto chileno, el técnico le advirtió: «Chuuuta, esta cuestión no sirve pa’ na’. Lo que necesita el auto, señora, es una nueva Constitución».
Entonces, el mecánico sacó un supuesto texto constitucional de su caja de herramientas y lo instaló en el motor del vehículo. «Chao señora. Ahora va a poder ir donde usted quiera», dijo. Tras el extraño arreglo, la mujer despidió al mecánico, subió al auto e intentó arrancar, pero no pudo.
«Una nueva Constitución no arregla todo. Este 25 de octubre, vota rechazo», leyó una jovial voz.
Esta situación ficticia es parte de un spot de la franja del Rechazo que buscó evidenciar, a través de ejemplo algo críptico, que el principal argumento de los que rechazan la creación de una nueva constitución de cara al plebiscito del próximo domingo es «rechazar para reformar».
Por otra parte, los que aprueban cambiar la carta magna, aducen que el documento actual de 1980 que fue redactado durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), establece un modelo neoliberal extremo que no garantiza todos los derechos básicos y que fomenta, en su estructura, la desigualdad social y económica en el país.
Este domingo 25 de octubre es el plebiscito. Los chilenos deberán elegir Apruebo, si quieren redactar una nueva Constitución, o Rechazo, si quieren mantener la actual. Las encuestas se inclinan por el Apruebo, pero el escenario está líquido y el voto oculto amenaza con dar una sorpresa. Frente a esto, ¿cuáles son los principales argumentos de ambos bandos?
Apruebo
Existe en Internet un decálogo de «las 12 razones para votar Apruebo este domingo«, creado por Francisco Vidal, exministro del Partido por la Democracia (centroizquierda) y una de las cartas de la oposición para las próximas elecciones presidenciales.
En este documento, Vidal resume que la razón principal para aprobar es poder garantizar los derechos sociales en la nueva Constitución. Y enumera: «Se necesita un sistema de seguridad social que cubra las pensiones, que la salud sea un derecho garantizado para todos, que se establezca el derecho a la vivienda que actualmente no existe, que se garantice el derecho al agua como bien de uso público», entre otras.
Y si bien estas son razones de fondo, hay un argumento de forma que casi todos los que aprobarán mencionan. «La actual Constitución carece de legitimidad, porque fue redactada e impuesta durante la dictadura», dijo a Sputnik el diputado del Partido Socialista (centroizquierda), Jaime Naranjo.
Naranjo es una de las caras visibles del Apruebo, al igual que los líderes de su partido y los de toda la oposición política chilena. El parlamentario afirmó que el argumento de base para aprobar es acabar con la Constitución de Pinochet. «Será un hecho histórico».
«No solo permitirá destruir los candados del modelo que dejó la dictadura, sino que también será un fuerte simbolismo», cerró.
Rechazo
«Los que proponen una nueva Constitución prometen cambios fantásticos, pero estos sólo podrán implementarse una vez terminado el proceso constituyente, es decir, en dos años más. El rechazo ofrece quedarnos con el documento actual y cambiar sólo las cosas que son necesarias y urgentes«, resumió a el diputado de Renovación Nacional (centroderecha), Leonidas Romero, ferviente defensor del Rechazo.
El parlamentario afirmó que es más eficiente mantener la Constitución y modificar sólo algunas partes. Ejemplificó con la reciente reforma constitucional aprobada en el Congreso que permitió a más de 8 millones de chilenos sacar anticipadamente un porcentaje de sus fondos de pensiones. «Este fue el vivo ejemplo de que se debe rechazar para reformar», agregó.
Además, Romero adujo que hay una ilegitimidad en el proceso constituyente debido a que se originó en el contexto de las masivas protestas ciudadanas del estallido social de 2019. «El proceso fue presionado por la violencia, los destrozos y los incendios del ‘estallido delincuencial’, lo que le quitaría validez de origen a una nueva Constitución», agregó.
La previa y la preparación
Este 23 de octubre a las 00:00 horas comenzó el periodo de prohibición de propaganda electoral. Ningún ciudadano puede gritar consignas, hacer campaña ni enarbolar banderas por una de las opciones del plebiscito. Si alguien decide ir a votar con una simpática mascarilla del Apruebo, o una pintoresca camiseta del Rechazo, se arriesga a fuertes multas.
El Gobierno desplegará 27 mil efectivos de las Fuerzas Armadas para custodiar los locales de votación, y los servicios de Metro en Santiago, Valparaíso y Concepción serán gratuitos el domingo.
Para este plebiscito hay 14.855.719 ciudadanos habilitados para votar. De ellos, el 51% son mujeres y el 49%, hombres. En total habrá 2.800 locales de votación repartidos a lo largo de Chile, y 48.000 mesas de urnas en ellos. En el extranjero residen 59.522 chilenos habilitados para votar, y se dispondrán locales oficiales en 65 países del mundo.
La mayoría de las encuestas le otorgan la victoria al Apruebo con una ventaja de hasta 40 puntos porcentuales. Pero nada está escrito y los argumentos aún pueden seguir convenciendo. O disuadiendo, también.
Por Francisco Bravo Atias – Corresponsal en Chile de Sputnik desde 2017. Anteriormente trabajó en los diarios La Segunda y El Mercurio. Graduado de periodismo de la Universidad Diego Portales de Chile.
