La sargenta Leanne Carr, que estuvo sirviendo durante 14 años en la Policía de la ciudad británica de Grantham, se vio obligada a dimitir por sufrir «intimidación y acoso» por parte de sus compañeros de trabajo tras compartir fotos atrevidas mientras estaba de baja por enfermedad.
En 2017, la mujer tomó una baja de siete meses por sufrir estrés. En los siguientes meses estuvo publicando en su cuenta de Instagram —donde ahora tiene más de 55.000 seguidores— las sensuales imágenes en las que posaba en bikini o incluso en toples en playas de Tailandia, Chipre y Sudáfrica.
Leanne también compartió fotos de su viaje a Austria. No obstante, no todos quedaron contentos con la vida de lujo de la uniformada, cuyo novio millonario, Luke Westen, es propietario de la popular marca de ropa deportiva Alutius. Algunos incluso acusaron a la mujer de «gastar fondos públicos».
El 17 de noviembre, Carr compartió con sus seguidores una devastadora publicación en la que afirmaba sufrir «intimidación, acoso y victimización» por sus fotos.
«Hay una persona real detrás del uniforme, un ser humano con sentimientos y emociones reales. Alguien que ya tuvo suficiente», declaró.
En otra publicación, confesó que a ella le gustan las mismas cosas que a todos los demás, como viajar, hacer deporte, cuidar su cuerpo y transmitir en directo su rutina de ejercicios o partidas de videojuegos.
«¿Por qué no puede una joven tener éxito en su carrera y, al mismo tiempo, disfrutar de su tiempo libre para hacer ejercicio, mejorar su salud y apariencia física, viajar y jugar a videojuegos?», declaró.
«Pongamos fin a la envidia y al odio», señaló Carr, quien agregó que todos los que juzgan a los demás por su raza, edad, género u ocupación necesitan «parar y pensar por qué sienten este odio».
«¡La vida es corta, aprende a amarte a ti mismo y a los demás!», concluyó.
