TEMUCO – El Presidente de la Democracia Cristiana y candidato a constituyente por el Distrito 22, Fuad Chahin, acompañado de la candidata a constituyente por el mismo distrito, Waleska Morales, y de los candidatos a constituyentes por el distrito 23, Jacqueline Burdiles y Heinrich Von Baer, presentaron el decálogo de compromisos de lo que debe comprender una nueva constitución, que sea acorde a los desafíos y necesidades de La Araucanía.
En la actividad, donde también estuvo presente el Presidente Regional de la DC, Carlos Vallejos, Chahin aseguró que «este debate tiene que ver con las ideas. Esta no es una elección de personalidades sino de contenidos; de cuáles van a hacer los contenidos que queremos ir a defender a la nueva constitución. Cuáles son los que queremos ir a proponer y defender. Y por lo tanto es muy importante que nosotros como candidatos a constituyentes asumamos un compromiso público con la ciudadanía de La Araucanía, tanto quienes van por el distrito 23 como el 22».
Asimismo, el Presidente DC dijo que «por eso hemos querido presentar de manera muy simple un decálogo con los diez puntos esenciales. Queremos establecer el principio de un Estado solidario y no un Estado subsidiario como lo entiende la actual constitución, como un Estado mínimo, maniatado. Nosotros queremos un Estado garante de los derechos sociales, que tenga la responsabilidad de velar por el bien común, y que, por lo tanto, tengamos un Estado moderno y descentralizado, pero con musculatura firme. Como decía Konrad Adenauer: «todo el mercado que sea posible y todo el Estado que sea necesario para garantizar el bien común».
Por otra parte, Chahin agregó que «además queremos incorporar en la constitución un deber del Estado de accionar contra el cambio climático y la protección de nuestro ecosistema y recursos naturales. Esta constitución tiene que ser verde. Tenemos que tener además un modelo de desarrollo y una economía social y ecológica de mercado. Otro punto que nos parece importante, sobre todo en esta región, es poder establecer claramente que el agua es un bien nacional de uso público. Es decir, que es el estado el responsable de poder administrar el agua y distribuirla de manera más justa y que el acceso a ella es un derecho humano».
El documento además comprende la seguridad garantizada por el Estado; la educación gratuita y de calidad, el fin de la discriminación hacia la mujer; el reconocimiento de Chile como un país unitario; el reconocimiento de la multiculturalidad y plurinacionalidad; pensiones dignas y salud oportuna y de calidad; y una constitución que reconoce a los emprendedores, la economía libre y que evita la concentración económica.