PADRE LAS CASAS – Un paso importante en la atención con pertinencia cultural, adaptada a las condiciones de la pandemia actual, se realizó en el Complejo Asistencial Padre Las Casas al propiciar la visita de un agente de medicina mapuche a uno de los pacientes internados en la UCI-2, quien además es lonco de una comunidad en el sector Culan-Los Añique, en Panguipulli.
La solicitud de visita e intervención comenzó por parte del mismo paciente durante su proceso de extubación del ventilador mecánico, luego de una dura etapa de tratamiento intensivo producto de una neumonía grave por coronavirus, al escribir la palabra «Machi» en una pizarra que se le facilitó para comunicarse.
Al informar a la familia del lonco, contactaron a una agente medicinal ancestral e iniciaron las gestiones coordinadas por medio de la asesora cultural Amuldingufe del CAPLC, y la subdirección médica del establecimiento, para buscar las condiciones adecuadas que permitieran realizar la visita en condiciones seguras.
«La atención de una persona especialista en medicina mapuche, se realizó bajo los mismos estándares de seguridad que normalmente cumplen nuestros funcionarios en forma diaria. Además, recibimos el apoyo del comité de Infecciones Asociadas a la Atención en Salud, quienes mostraron el adecuado uso de elementos de protección personal y supervisaron en todo minuto la actividad, siempre permitiendo dar la privacidad necesaria para llevarla a cabo», señaló el jefe del Servicio de Pabellón, que actualmente funciona como UCI-2, Dr. Rodrigo Muñoz Pablo.
Compatibilizar la atención
De esta forma, la machi Denise Márquez Catrifol, del sector Huilío, comuna de Freire, acudió a la unidad donde se encontraba internado el paciente para realizar una rogativa, considerando las condiciones en que se encontraba el paciente.
«Al final uno se adapta al sistema que hay ahora, nosotros hacemos un gran esfuerzo de aceptar el protocolo, así como también los encargados de los hospitales se deben adaptar al protocolo de uno. Que sea una conversación, se puede compatibilizar todo. Así como estamos ahora, tiene que ser compatibilizado», señaló la machi.
Por su parte Guido Calfuluan Cuminao, hijo del paciente, valoró la posibilidad de llevar la asistencia espiritual que demandaba su padre, «para nosotros es bastante tranquilizador que la machi le haya podido hacer un poco de guillatu para fortalecer su newen. Para nosotros es algo muy importante poder restablecer su equilibrio espiritual, por eso es tranquilizador haber dado este primer paso».
«Se entiende que el contexto es de encierro y todo lo que tiene que ver con una sala de urgencia, pero agradecemos que este hospital abra las puertas a darle la pertinencia a la salud que corresponde en este territorio. La voluntad es lo principal para poder lograr este tipo de cosas, la vocación de sanar no solamente un virus, sino que también el espíritu de las personas, y eso es lo que intentamos traer acá a mi papá, que es lonco», agregó.
Finalmente, la directora del CAPLC, Andrea Catalán, valoró las coordinaciones que permitieron esta acción que une la medicina tradicional con la salud intercultural, y destacó que «en nuestro reciente primer año de funcionamiento parcial y progresivo, nos encontramos trabajando en instancias que refuercen la pertinencia cultural de la atención en salud, con la pronta conformación de un Comité de Salud Intercultural, que permitirá fomentar las buenas prácticas en este ámbito y considerar las solicitudes de compatibilizar los tratamientos y cuidados de la medicina tradicional con las consideraciones culturales, manteniendo la seguridad y la calidad de la atención».