BOGOTÁ (Sputnik) — La defensa del general retirado Mario Montoya, excomandante del Ejército, a quien se señala de tener responsabilidad en 104 casos de asesinatos de civiles por parte de militares, indicó que el oficial insistirá ante la JEP de que posee todos los elementos que permiten evidenciar que no tiene relación con tales crímenes.
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«Seguiremos en la JEP presentando los elementos de juicio con los cuales se demostrará que el general Mario Montoya no tiene nada que ver con los execrables crímenes mal llamados como ‘falsos positivos'», dijo el abogado Andrés Garzón en declaraciones difundidas por la emisora RCN Radio.
Los «falsos positivos» fueron una práctica recurrente durante años en algunos integrantes del Ejército, quienes asesinaros a civiles para hacerlos pasar como guerrilleros caídos en combate y obtener privilegios, como ascensos y compensatorios.
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Las declaraciones de Garzón se dan luego de que el martes la JEP dijo que tiene competencia exclusiva y prevalente, por delante de la Fiscalía, sobre las investigaciones que se le siguen a Montoya por su presunta participación en esos 104 casos de asesinatos extrajudiciales de civiles por parte de militares para hacerlos parecer como guerrilleros muertos en combates.
Al respecto, el abogado señaló que «la decisión proferida por la JEP es una determinación que estaba anunciada desde el momento mismo en que la Fiscalía solicitó la audiencia de imputación, ya que era totalmente incompetente para realizar tal diligencia».
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El anuncio de la JEP significa que la justicia ordinaria, es decir la Fiscalía, no podrá avanzar por ahora en la imputación de cargos que tenía previsto realizarle a Montoya por tales asesinatos, conocidos popularmente en el país como «falsos positivos».
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Montoya, tras prometer aportar la verdad de los hechos, se acogió en 2018 a la JEP, mecanismo creado en el marco de los diálogos de paz de La Habana para juzgar a excombatientes de la antigua guerrilla de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia), militares y terceros que financiaron el conflicto armado interno.
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Sin embargo, organizaciones de víctimas y derechos humanos piden que sea expulsado del tribunal de paz ya que, sostienen, no ha aportado a la verdad de los hechos ocurridos y se empeña en negar que tenga responsabilidad en tales crímenes.
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En 2007
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De acuerdo con los elementos de prueba, Montoya, mientras se desempeñó como comandante del Ejército Nacional, habría desconocido una directiva emitida por el entonces comandante general de las Fuerzas Militares en noviembre de 2007, en la que ordenó a todas las unidades privilegiar las desmovilizaciones colectivas e individuales, así como las detenciones, sobre las muertes en combate.
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Según la Fiscalía, también hay indicios de que en su cargo como comandante del Ejército, Montoya habría promovido maniobras para evitar que quedaran en evidencia sus instrucciones.
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Por tales motivos la justicia ordinaria preveía imputarle los delitos de homicidio agravado en concurso homogéneo y sucesivo con ocultamiento, alteración o destrucción de elemento material probatorio.
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Según la JEP, 6.402 personas fallecieron en Colombia por los «falsos positivos» entre 2002 y 2008, una cifra mucho mayor que la señalada por la Fiscalía, que afirma que son 2.000.
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