ARGENTINA — Las autoridades en Chile están encendiendo las alarmas por los repetidos decomisos de armas en pequeñas cantidades que se están traficando por Argentina, en un momento en que la nación del Pacífico busca controlar el crimen organizado y mantener a raya las tasas de homicidios.
.
Por Gabrielle Gorder
Socio Informativo – InSight Crime
.
El 19 de abril, el subsecretario del interior chileno Manuel Monsalve anunció una colaboración entre las autoridades chilenas y argentinas para investigar una ruta de tráfico de armas entre ambos países. Su anuncio se dio un día después de la detención de un camión en Mendoza, Argentina, cargado de balas, cargadores, pistolas y un kit para transformar armas en rifles automáticos.
El descubrimiento de las armas en Mendoza, conocido centro de tráfico de personas y narcóticos con destino a Chile, es uno de una serie de pequeños decomisos dirigidos hacia la frontera Argentina-Chile.
A comienzos de abril, fue detenido un pasajero de un bus en el trayecto entre la capital argentina Buenos Aires y Chile, con 11 armas de fuego ocultas en dos morrales. De igual manera, en noviembre de 2021, las autoridades aprehendieron a tres chilenos en Argentina, cerca de la frontera sur del país con Lonquimay, en Chile, llevando municiones y uniformes camuflados.
En abril de 2021, las autoridades hallaron un arsenal de armas y explosivos en la residencia de un funcionario judicial chileno en un operativo antinarcóticos; posteriormente se estableció que las municiones procedían de Argentina.
Las fuentes acusan a diferentes actores en Chile. Algunos legisladores han culpado de la compra de armas en Argentina al movimiento de resistencia mapuche, conformado por comunidades indígenas que buscan recuperar sus territorios ancestrales. Luis Toledo, director de la unidad antinarcóticos de la Fiscalía General de Chile, ha apuntado a las bandas delincuenciales extranjeras que han hecho presencia en el país en los últimos años.
En una entrevista de radio reciente, Toledo señaló que, si bien Chile está lejos de convertirse en un “narcoestado”, se encuentra ante el “inicio de un camino que no tenga retorno”, debido al incremento de armas en circulación en el país.
Con ello coincidió el subsecretario Monsalve al advertir después del último decomiso que el flujo de armas hacia Chile puede tener un impacto en la tasa de homicidios del país, y señaló que “más del 50% de los homicidios hoy día se están produciendo por armas de fuego, por lo tanto el [ataque al] comercio ilegal y el control de las armas constituye también una tarea prioritaria en la lucha contra la delincuencia».
Análisis de InSight Crime
A pesar de las envidiables tasas de homicidios en Chile, en comparación con gran parte de Latinoamérica, la evolución de su dinámica criminal es una preocupación muy real.
Aun con las severas restricciones sobre la manufactura, venta y circulación de armamento, sigue habiendo en circulación un número importante de armas ilegales en Chile. Y no todas proceden de Argentina.
En años recientes, se han decomisado armas que han sido ingresadas de contrabando a Chile desde Estados Unidos, Europa y Asia por medio de aeropuertos y puertos marítimos. El puerto de Iquique ha sido especialmente usado por los traficantes de armas, como lo informó InSight Crime en agosto de 2021.
La inteligencia militar ha descubierto que las armas que llegan a los puertos de Chile por lo general se destinan al tráfico hacia Ecuador e incluso hacia Colombia. Por consiguiente, la importancia del flujo de armas en Chile se extiende más allá de sus fronteras.
Como señalaba Juan Pablo Toro, director ejecutivo de AthenaLab, un importante centro de pensamiento chileno sobre seguridad, en conversación con InSight Crime en 2020, “en un país con una de las tasas de homicidios más bajas de la región, es lógico preocuparse cuando estos hechos se vuelven más frecuentes”.
