SANTIAGO – Tras la implementación del nuevo plan del Gobierno que multa a las empresas que dejen subir a pasajeros sin pagar, un bus del transporte público fue atacado por parte de un usuario al que no dejaron subir por la puerta trasera.
Esta medida, que busca disminuir el 44% de evasión que existe en la red de locomoción capitalina que mueve a 3,8 millones de personas al mes, no fue aceptada por el gremio, puesto que analizan una eventual paralización.
Y es que según los conductores, se enfrentarán a este tipo de agresiones constantemente, por lo que el plan no es viable.
«No tenemos porque hacernos responsables ni pagar una infracción por la evasión, siendo que esa es responsabilidad netamente de la empresa. No descartamos la paralización del sistema«, aseveró Christopher González, presidente del Sindicato Sector Las Torres y Los Presidentes.
Para los conductores la solución es que existan más zonas pagas, arista que está incluida en este nuevo plan, además de reforzar los controles a pasajeros y aumentar las fiscalizaciones.
Las consecuencias de esta normativa mantiene en alerta a los conductores, pero las multas por el no pago en el transporte público son desde $63.000 hasta $94.000, mientras que las empresas pueden ser sancionadas con multas desde los $216.000 hasta sobre el millón de pesos.
Fuente: 24 Horas