FAMILIAS DE AZAPA CONSTITUYEN ASAMBLEA Y EXPRESAN RECHAZO A PROYECTO ELÉCTRICO QUE AMENAZA HOGARES CULTIVOS Y PATRIMONIO NATURAL Y CULTURAL

El Centro de Estudios Camanchaca brindó capacitaciones a los vecinos para que conocieran  las características y el impacto de la propuesta.  Habitantes alegan que ni el Estado ni la empresa ejecutora les han pedido su opinión

Denuncian que no han sido convocados a un proceso de planificación de la participación ciudadana, limitándose a difundir afiches para reuniones de definidas unilateralmente

por: Septentrional Comunicaciones Ltda.

Un conjunto de familias ariqueñas expresaron su rechazo a la instalación de torres de alta tensión en Azapa, a metros de sus viviendas y parcelas, donde han vivido por años, lo que perciben como una amenaza real tanto para su salud como para sus predios y cultivos, el terreno arqueológico adyacente (Pucará de San Lorenzo) y el ecosistema del valle.

Así quedó de manifiesto en una jornada de capacitación dictada por el Doctor (c) Bosco González Jiménez, Director del centro de estudios Camanchaca  y Claudio Vila Bustillos, Abogado de la misma institución, quienes expusieron ante los vecinos de Azapa las características generales del proyecto como también el impacto social y medioambiental que se generará a partir de la iniciativa, además, de dar a conocer el marco jurídico que debe resguardar los adecuados procesos de participación ciudadana para el caso de las familias que hoy se ven afectadas.

Las familias alegan falta de información sobre el proyecto eléctrico por parte de órganos del Estado como el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA). Es por eso que han recurrido a la asesoría del Centro de Estudios Camanchaca para conocer los alcances de la propuesta.

Es más, denuncian que se enteraron de manera sorpresiva e informal del proyecto de electrificación denominado “Nuevas líneas 2×220 Kv entre Parinacota y Cóndores”, a cargo de la  empresa Red Eléctrica del Norte S.A, iniciativa que se incorporó a un proceso de evaluación de impacto ambiental que coordina administrativamente la dirección ejecutiva del Servicio de Evaluación Ambiental.

Mireya Cisterna y sus cuatro hermanos viven en la parcela 21 del kilómetro 11 del valle de Azapa. La familia fue la primera en enterarse. “Nos vinimos  a enterar porque justo había una persona que habían mandado de Santiago a hacer unas calicatas (sondajes) y quería ingresar a la parcela, entonces no se le dio la autorización porque no sabíamos de qué se trataba, y él hacia el comentario de que se iban a instalar unas torres de alta tensión, y que eso ya estaba todo listo y que el proyecto estaba zanjado”.

“Ha existido falta de información, por lo mismo nos acercamos al Centro de Estudios Camanchaca para que nos puedan ayudar, porque realmente nadie explica nada, estamos en el aire y todos dicen que los trazos están listos y que las torres van a pasar por las parcelas, y nosotros dónde vamos a vivir, si esas son nuestras viviendas”, agregó la vecina del kilómetro 11 del valle de Azapa.

Agregó que de lo que ha podido rastrear del proyecto, el eje de la salud de las personas, ni siquiera se menciona en los informes y estudios relacionados al proyecto, lo que considera una importante omisión. “Estaba leyendo un informe por internet, y se preocuparían de lo arqueológico, de las aves, de la naturaleza, y la parte humana dónde la dejamos, en ningún informe sale que están preocupados de la gente que vive ahí, de que no nos enfermemos”.

Terrenos Agrícolas

Alberto Focacci, antiguo residente ariqueño, vive en el predio agrícola “San Lorenzo” del kilómetro 11 y medio, expresó sus aprensiones a la salud. “Tengo información que esto perjudicaría la salud de los habitantes que viven cerca de estas instalaciones eléctricas de alta tensión. De acuerdo a lo que leído, esto atentaría a la salud, y es la principal preocupación para habitantes, propietarios, agricultores, trabajadores”.

Focacci, además, mostró su preocupación respecto de lo que pasaría con los terrenos agrícolas. “Tengo información que esto va a perjudicar los sembríos de carácter agrícola y nosotros como agricultores tenemos grandes aprensiones sobre estas instalaciones. Secundariamente, también hay una depreciación de los terrenos y de las propiedades”.

“No nos asesinen el valle”

Los habitantes del valle manifestaron de manera unánime que ninguno ha sido consultado sobre su parecer respecto del proyecto. Tampoco informados. Cecilia Koch, residente de la parcela 20 “Las Tres Marías” del kilómetro 11 del desvío a Las Maitas en Azapa, expresó también que hay un menoscabo y un atropello a los derechos de propiedad mediante la servidumbre que se trataría de imponer con la instalación del tendido eléctrico, y planteó que allí hay una inconsistencia. “Entiendo que hay una prohibición de servidumbre cuando hay cultivos agrícolas”.

“No nos asesinen el valle”, sostuvo con fuerza la habitante del valle al conocer en la asamblea todos los aspectos relacionados al proyecto. “Somos la despensa agrícola del país, esto es muy peligroso para las tierras agrícolas”.

¿Participación ciudadana?

El jueves 18 de octubre el SEA realizará dos reuniones de participación ciudadana respecto del proyecto. Las familias de los terrenos a intervenir no ven con buenos ojos esta instancia, ya que consideran no hay una simetría en el conocimiento técnico entre, por una parte, el Gobierno y la empresa, y por otra, los habitantes de los predios. Por lo anterior, creen que no hay condiciones de igualdad para participar, y sienten que su sola presencia “será utilizada” para validar la instalación de torres de alta tensión.

Plantearon tras la capacitación con Camanchaca que el marco jurídico vigente les da mayores herramientas de participación como consultas ciudadanas, audiencias públicas y diálogos, entre otras muchas acciones. Por eso consideran las dos reuniones convocadas para el próximo jueves por el SEA como “insuficientes” y “utilitarias” a los intereses de la empresa que realizará el proyecto de 72 millones de dólares que proyecta la instalación de torres de alta tensión en las regiones de Arica y Parinacota y Tarapacá, específicamente, en las comunas de Arica, Camarones, Alto Hospicio y Huara.

En la asamblea, decidieron redactar una carta que presentarán al SEA objetando las reuniones convocadas para el próximo jueves, así como solicitando, mecanismos de participan real y simétricas, donde puedan expresar de verdad, su posición frente al proyecto eléctrico.

Alcance Regional

Las familias están convencidas que el impacto de la construcción de las torres no sólo afectará las parcelas inmediatas al tendido eléctrico si no que generará consecuencias negativas en todo el valle de Azapa, lo que finalmente, perjudicará a la región, por lo tanto, las recientes asambleas desarrolladas por los vecinos y el Centro de Estudios Camanchaca fueron de carácter abierta y con invitación a las autoridades con cargo de representación popular para que se interiorizaran de la situación.

El diputado Vlado Mirosevic expresó que junto a su equipo recibieron una llamada de los vecinos alertándolo sobre el proyecto, y que se encuentra en la fase de interiorizarse para conocer los alcances de éste.

“Queremos ver cómo podemos ayudar a los vecinos a frenar un proyecto que sería negativo, pero todavía estamos recopilando los primeros antecedentes, y no me gustaría hacer mucho más juicio hasta que tuviéramos mayor información, pero a lo que nos hemos comprometido es a acompañar el proceso junto a los vecinos que están siendo afectados de manera directa. Veremos cuáles son las acciones a tomar en el futuro”, expresó el diputado Mirosevic.

El concejal de Arica, Luis Malla, también planteó su inquietud. “Una comunidad informada es una comunidad que realmente puede tomar decisiones, y puede votar y hablar. Yo siento que esto se debe aplazar (reuniones del 18 de octubre) hasta que las familias tengan la información para poder decidir. Tenemos que dar luces de participación real y digna”.

Malla agregó que “hoy la centralización es tremenda, y vemos como el SEA decide en Santiago sobre cosas que están pasando en Arica, aun así no están informando a la población, mientras no esté informada, no hay paridad de información entre lo que tiene el Gobierno y entre lo que debe tener la comunidad”.

Expresó que como concejal apoyará el planteamiento de la comunidad de posponer la reunión convocada por el SEA así como las decisiones que adopten.