Los cancilleres de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay se encuentran reunidos en esta ciudad para elaborar una estrategia destinada a darle un impulso definitivo a las negociaciones por un acuerdo comercial entre el Mercosur (Mercado Común del Sur) y la Unión Europea (UE).
Los cancilleres del Mercosur ratificaron en su «vocación» de seguir trabajando para concretar el demorado acuerdo comercial con la Unión Europea (UE), a pesar de que persisten asuntos «dificultosos» en las tratativas.
«Hemos analizado junto con los cancilleres y equipos técnicos una serie de propuestas que la UE nos había hecho para poder continuar en las negociaciones y poder llegar, como todos deseamos, a un entendimiento comercial (…) Nuestra vocación es seguir trabajando, buscando», afirmó el ministro anfitrión, el uruguayo Rodolfo Nin Nova, en conferencia de prensa conjunta al término del encuentro.
El ministro señaló que los planteamientos del bloque europeo fueron aceptados en su mayoría, aunque «hay algunos que siguen siendo más dificultosos, más sensibles».
«Todos tenemos sensibilidades», afirmó.
Nin Novoa y sus pares Jorge Faurie, de Argentina, Aloysio Nunes, de Brasil, y Luis Alberto Castiglioni, de Paraguay, tuvieron un primer encuentro el 14 de octubre en la capital uruguaya y volvieron a reunirse a primera hora de este 15 de octubre para analizar una estrategia destinada a darle un impulso definitivo a las negociaciones con Bruselas.
El ministro señaló que las diferencias se siguen presentando en las mismas áreas de negociación: indicaciones de origen de los productos a comerciar, industria automotriz, lácteos y la oferta de la UE en cuanto a acceso a mercados.
Elecciones en Brasil
En tanto, Nunes señaló que las negociaciones entre ambos bloques ya llevan mucho tiempo y que han tomado impulso en los últimos dos años, y por eso aseguró que el resultado de las elecciones en Brasil —que celebrará balotaje el 28 de octubre— no afectarán las gestiones.
Nunes afirmó que el acuerdo que negocia el bloque sudamericano con la UE, así como los que también procura con Singapur y Corea del Sur, son un «interés objetivo» de la sociedad brasileña toda, más allá de las disputas electorales.
«No creo que haya polémicas en torno al tema Mercosur-UE; no fue algo conflictivo en la campaña electoral», dijo el canciller brasileño en Montevideo.
Por su parte, Faurie reconoció que ha sido un «proceso intenso» de negociaciones en los últimos dos años, y señaló que las diferencias entre ambos bloques no representan necesariamente obstáculos.
«No son escollos, son temas donde tenemos sensibilidades de las dos partes», dijo el ministro argentino, y aseguró que las gestiones se encuentran «en su etapa final».
Las negociaciones entre el Mercosur y la UE para lograr un acuerdo comercial se arrastran desde hace casi 20 años; en 2010 recomenzaron, pero se congelaron en 2012 para recuperar dinamismo en 2016.
Se esperaba que el acuerdo estuviera cerrado a finales de 2017, pero las negociaciones se extendieron debido a la resistencia de los sectores agrícolas de algunos países europeos.