China continúa avanzando en tecnología espacial. Los próximos dos años podrían ocurrir los primeros vueltos de dos modelos de sus cohetes reutilizables, lo cual le ayudaría a reducir costos gubernamentales al gigante asiático.
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China Aerospace Science and Technology Corp (CASC) —conglomerado estatal y principal contratista espacial del país— está acelerando el desarrollo de un vehículo de lanzamiento reutilizable de 4 y 5 metros de diámetro, cuyos dos modelos podrían realizar sus vuelos inaugurales en 2025 y 2026, informó el medio oficial Global Times.
«En los últimos años, China ha abordado continuamente las tecnologías clave de los cohetes portadores reutilizables, y el progreso general es actualmente muy fluido», declaró Rong Yi, diseñador jefe de la nueva generación de cohetes portadores de la Academia China de Tecnología de Vehículos de Lanzamiento (CALT), dependiente de la CASC.
También explicó que los cohetes reutilizables implican algunas grandes categorías de tecnologías clave. En primer lugar, garantizar un aterrizaje preciso durante el retorno del cohete; en segundo, garantizar un aterrizaje y una recuperación estables. En tercer lugar, garantizar la durabilidad del cohete para cumplir los requisitos de reutilización. Y en cuarto, asegurar una reparación rápida para el mantenimiento local cuando sea necesario.
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El 19 de enero de 2024, Pekín completó una exitosa prueba del cohete VTVL-1 (cohete de despegue y aterrizaje vertical), prototipo del cohete espacial reutilizable Zhuque-3, comunicó la empresa LandSpace Technology.
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«El aterrizaje fue suave y preciso, el cohete está en buenas condiciones. El vuelo ha sido exitoso», comentó la empresa en la red social WeChat.
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Zhuque-3 (ZQ-3) es un cohete reutilizable de nueva generación, con motor de oxígeno y metano líquido, diseñado por LandSpace Technology. Mide 4,5 metros de diámetro y 76,6 metros de largo; el peso al despegue alcanza unas 660 toneladas.
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Se espera que la primera etapa del Zhuque-3 pueda utilizarse al menos 20 veces. El primer vuelo del cohete de origen chino está programado previamente para 2025.