El diputado Sergio Bobadilla (UDI) es acusado de «apitutar» a una amiga al interior del Congreso Nacional con un sueldo cercano a los 3 millones de pesos.
Según reveló un reportaje de Radio Biobío, el parlamentario contrató como «asesora» a Carolina Alejandra Arias Arévalo, quien para ese entonces ya se desempeñaba como jefa de la Unidad de Participación y Vinculación Territorial del SLEP Andalién Sur, de Concepción, a tiempo completo.
Gracias a esta designación, la funcionaria obtenía una doble remuneración bruta que alcanzaba los 5,3 millones de pesos mensuales.
Más que el sueldo en sí, el problema radica en que el Consejo Resolutivo de Asignaciones Parlamentarias, entidad colegiada encargada de regular estas materias, impide la contratación de funcionarios públicos en calidad de asesores. El objetivo de dicha norma es «propiciar un correcto uso de las asignaciones parlamentarias».
La respuesta del diputado Bobadilla
Al ser consultado por la situación de Carolina Arias, el diputado Bobadilla reconoció tener un estrecho vínculo con la mujer, pero insistió en que, «de existir algún problema, por cierto lo corregiremos».
«Con la Caro tuvimos una relación laboral, de equipo, de confianza, de apoyo, desde hace más de 20 años, cuando comencé mis funciones públicas y parlamentarias. Siempre ha sido un pilar fundamental en todo el trabajo que he desarrollado en las comunas que me ha tocado representar», sostuvo al medio antes mencionado.
El parlamentario explicó que la mujer fue contratada «temporalmente considerando su vasta experiencia en trabajo territorial y siempre está aportando con ideas en distintos temas relevantes para mi gestión».
No obstante, fue enfático en señalar que «de existir algún problema (…) podría ser administrativo, de contratación y que por cierto corregiremos si se nos observa por parte de la cámara, pero jamás se podría poner en cuestión su capacidad profesional».
«Tejado de vidrio»
Luego de que la contración de Arias quedara al descubierto, varios parlamentarios reaccionaron en contra de las acciones de Bobadilla.
Por ejemplo, el diputado Leonardo Soto (PS) acusó que el militante UDI tenía «tejado de vidrio»: «Tan vociferante con la corrupción de otros y reservado con la propia», expresó.
Por su parte, el diputado Andrés Giordano (FA) advirtió que Bobadilla sería llevado a Comisión de Ética.
«A pesar de estar prohibido por tener un contrato a tiempo completo en otro servicio público, el diputado Bobadilla metió en el Congreso a una amiga como funcionaria ganando casi 3 millones de pesos al mes», cuestionó.
Fuente: 24horas.cl
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