El presidente alcanzó el último triunfo legislativo de su Gobierno.
La polémica reforma judicial que impulsó el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, alcanzó en tiempo récord el respaldo de los 17 congresos estatales que requería para ser promulgada, después de haber sido aprobada en la Cámara de Diputados y en el Senado.
Tamaulipas se convirtió en el estado que logró el número que el Gobierno necesitaba para que el proyecto entre en vigor antes de que López Obrador termine su presidencia, el próximo 1 de octubre. En la mañana del jueves, Zacatecas se unió a los respaldos para alcanzar los 18.
Previamente lo hicieron Oaxaca, Tlaxcala, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz, Nayarit, Yucatán, Baja California, Baja California Sur, Colima, Morelos, Durango, Puebla, Campeche, Sinaloa y Guerrero.
Los congresos locales de esos estados convocaron a sesiones extraordinarias el miércoles para votar la reforma judicial, el último gran proyecto legislativo de López Obrador que provocó un álgido debate político durante las últimas semanas, que incluyó manifestaciones masivas a favor y en contra, y una inédita huelga del Poder Judicial.
Así, en menos de 24 horas, 17 de los 32 estados del país ratificaron una ley que permitirá que, a partir del próximo año, los jueces, magistrados y miembros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) sean elegidos a través del voto popular.
López Obrador presentó la reforma en febrero pasado, pero después de meses de debate, críticas y resistencias, el rotundo triunfo del oficialismo en las elecciones presidenciales y legislativas realizadas el 2 de junio permitió que se concretara un proceso parlamentario exprés.
Cronología
El domingo 1 de septiembre asumió la nueva Legislatura, que tiene una amplia mayoría del oficialista Movimiento de Regeneración Nacional (Morena). El miércoles 4 de septiembre, la Cámara de Diputados aprobó la reforma y de inmediato la envió para su debate en el Senado, que la ratificó siete días después en una escandalosa jornada.
Para que entrara en vigor, la nueva ley debía ser aprobada por lo menos por 17 de los 32 congresos de las entidades federativas. No había duda de que ello ocurriría porque Morena gobierna en 24 de ellas, en las que también tiene mayoría legislativa.
De hecho, en cuanto terminó la votación en el Senado, el congreso de Oaxaca se convirtió en el primero en aprobar la reforma. En las horas siguientes se sumaron en cascada 17 legislaturas más.
En todos los casos, las sesiones se llevaron a cabo en medio de protestas de los trabajadores del Poder Judicial que rechazan la iniciativa. En Yucatán y Baja California incluso tomaron la tribuna.
Algunos debates parlamentarios locales duraron escasos minutos. Una excepción fue Puebla, ya que los diputados sesionaron durante nueve horas.
Hasta ahora, la nueva ley solo ha sido rechazada en el congreso de Quéretaro, donde gobierna el opositor Partido Acción Nacional (PAN). En Nuevo León, que es gobernado por Movimiento Ciudadano, el debate se postergó para el próximo martes.
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