WWF llama a los países a invertir en el futuro y a acordar un nuevo objetivo para financiar acciones climáticas que satisfaga las necesidades de los países en desarrollo.
En 2025 los países deben actualizar sus compromisos climáticos, esperándose que Chile pueda incrementar la ambición de sus contribuciones y también avanzar en la implementación.
Una “ventana decisiva” es la que se abre desde ahora, con la próxima COP29 de Clima a celebrarse en Bakú, Azerbaiyán, y hasta el 2030. WWF advierte que los próximos 12 meses podrían ser decisivos para el futuro del planeta, considerando que los países tienen plazo hasta la próxima COP de Brasil en 2025 para presentar nuevos planes climáticos nacionales (Contribuciones Nacionalmente Determinadas o NDC) más ambiciosos.
Con temperaturas que se disparan a niveles récord y los impactos climáticos catastróficos que causan estragos en todo el mundo, la necesidad de una acción urgente y transformadora para eliminar gradualmente los combustibles fósiles, transformar los sistemas alimentarios y detener y revertir la pérdida de la naturaleza nunca ha sido mayor. La COP29 llega en un momento crucial, para impulsar el ritmo de la acción climática durante los próximos cinco años.
“Recientemente hemos visto la devastación de millones de hectáreas en Sudamérica debido a incendios forestales que también han afectado con dureza a comunidades y sus medios de vida, principalmente en Brasil, Bolivia, Perú y Colombia. Luego en España, un fenómeno meteorológico extremo con consecuencias catastróficas, vuelve a mostrarnos que el cambio climático puede afectar nuestras vidas de forma radical en cualquier punto del planeta, por lo cual reforzar la acción climática global para revertir esta crisis se vuelve cada vez más urgente”, señaló Ricardo Bosshard, director de WWF Chile, destacando la necesidad de que la COP29 pueda generar avances en esta línea.
“Lo que ocurra en Bakú marcará la antesala de un paso que es crucial para los avances que el planeta necesita, como es la actualización de NDCs, en donde esperamos que Chile pueda incrementar la ambición climática, profundizando la integración entre los compromisos de clima y biodiversidad, integrando así más soluciones basadas en la naturaleza, entre otros aspectos, pero también dando fuertes señales de un impulso a la implementación. Hay aspectos en los que aún estamos al debe, como por ejemplo en restauración, donde hemos comprometido restaurar un millón de hectáreas de paisajes al 2030”, agregó Bosshard.
Aumentar el financiamiento
Un aumento significativo de la financiación climática será esencial para garantizar que esta acción transformadora y sus beneficios para las personas y la naturaleza, se conviertan en realidad. En la COP29, los países se disponen a negociar una nueva meta de financiamiento para el clima: el Nuevo Objetivo Colectivo Cuantificable (NCQG, por sus siglas en inglés, New Collective Quantifiable Goal). Para obtener un resultado exitoso, los países deben garantizar que este nuevo objetivo satisfaga las necesidades de mitigación, adaptación y pérdidas y daños de los países en desarrollo.
Manuel Pulgar-Vidal, líder global de Clima Energía de WWF y presidente de la COP20, indicó que «este es un año decisivo para la acción climática. La COP29 debe ser la plataforma de lanzamiento para un cambio urgente y transformador. Las soluciones a la crisis climática las tenemos disponibles ahora, pero sin el financiamiento adecuado no se pueden implementar a la velocidad y escala necesarias. Simplemente no podemos seguir retrasando una respuesta urgente. Es hora de invertir en nuestro futuro”.
«Es crucial establecer un nuevo y ambicioso objetivo de financiación climática que satisfaga las necesidades de los países en desarrollo. “Sin garantías de financiamiento, estos países no pueden aumentar sus compromisos climáticos. Después de años de promesas incumplidas, esta cumbre debe dar inicio a una nueva era para el financiamiento climático y construir confianza a nivel global”, puntualizó Pulgar-Vidal.
Fernanda Carvalho, directora de Política Energética y Climática de WWF, señaló que “las medidas que adoptemos en los próximos cinco años serán fundamentales si queremos tener la oportunidad de limitar el calentamiento global a 1,5 °C y evitar los peores impactos de la crisis climática. A medida que los países desarrollan sus nuevos planes climáticos nacionales, deben asegurarse de implementar urgentemente acciones rápidas y transformadoras”.
Enfatizó además que “la COP29 será un momento crucial para generar consenso en torno al nivel de ambición, el apoyo y las soluciones que se necesitan. Los países deben demostrar que están respondiendo al resultado de la COP28 incorporando planes de eliminación gradual de combustibles fósiles dentro de sus estrategias nacionales. Transformar el sector energético es la forma más poderosa de reducir rápidamente las emisiones y evitar una catástrofe climática”.
Para limitar el calentamiento global a no más de 1,5 °C, las emisiones globales deben reducirse en un 43 % para 2030, un 60 % para 2035 y alcanzar cero emisiones netas para 2050. La lista de verificación de las NDC Que Queremos, según WWF, incluye elementos importantes que los países deberían incluir al diseñar nuevos planes climáticos nacionales alineados con estos objetivos.
La COP29 también debería apuntar a consolidar el papel de la naturaleza en la acción climática. Las crisis climática y de la naturaleza están inextricablemente vinculadas. En las recientes decisiones de la COP sobre el clima, los países han reconocido cada vez más la importancia de la naturaleza y de las soluciones basadas en la naturaleza en la acción climática. Ahora, los países deben convertir este reconocimiento en acción integrando plenamente la naturaleza en el desarrollo y la ejecución de sus planes nacionales de acción climática y adaptación.
WWF está pidiendo un nuevo Programa de Trabajo sobre Clima y Naturaleza dentro de la CMNUCC para implementar las recomendaciones sobre la naturaleza que resultaron de la COP28, promover sinergias entre los planes nacionales sobre clima y biodiversidad e incorporar soluciones basadas en la naturaleza y enfoques basados en los ecosistemas.
Una lista completa de los resultados esenciales que se necesitan en Bakú está disponible en el Documento de expectativas de la COP29 de WWF.
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