Tras conocerse el traslado desde la cárcel de Rancagua al anexo penitenciario Capitán Yáber del exsubsecretario del Interior, Manuel Monsalve, surgieron algunos cuestionamientos acusando un supuesto «trato privilegiado» hacia la exautoridad.
Gendarmería hizo frente a las críticas y se refirió de manera oficial a esta acción mediante el subdirector operativo de la institución, Leandro Pincheira, quien descartó tales privilegios y enfatizó que la medida responde a las «nuevas amenazas» que recibió el exfuncionario de gobierno.
Consultado sobre por qué se decide que Capitán Yaber sea el destino, el representante de Gendarmería recalcó que «nosotros tenemos la obligación de salvaguardar la integridad física de los casi 60 mil internos que tenemos hoy en las casi 80 unidades penales del país y nosotros vamos haciendo una evaluación técnica por parte de nuestros profesionales y equipos técnicos y vamos evaluando en relación a los antecedentes que vamos realizando».
En línea con lo anterior, reiteró que «nosotros proponemos siempre a los tribunales cuando las personas son imputadas y finalmente son los tribunales quienes determinan la unidad penal donde las personas van a cumplir la prisión preventiva».
Asimismo, Pincheira confirmó que Monsalve es el único imputado «que actualmente se encuentra por delitos sexuales» en Capitán Yáber.
