WUHAN (Xinhua) — China ha construido un hospital provisional en 10 días para luchar contra la nueva cepa del coronavirus en Wuhan, el epicentro del brote del virus en la provincia de Hubei, centro de China.
El Hospital Huoshenshan (Montaña del Dios del Fuego) fue entregado hoy domingo en Wuhan. Estará dedicado a atender a pacientes infectados por el virus.
En total, 1.400 miembros del personal médico de las fuerzas armadas estarán encargados de atender a los pacientes en el Hospital Huoshenshan a partir del lunes. Los médicos son 950 de hospitales afiliados a la Fuerza Conjunta de Apoyo Logístico del Ejército Popular de Liberación (EPL), y 450 de universidades médicas del ejército, la armada y la fuerza aérea del EPL, quienes fueron enviados previamente a Wuhan.
Wuhan, que replicó el modelo de tratamiento del SARS de Beijing en 2003, empezó a construir dos hospitales provisionales: el Leishenshan (Montaña del Dios del Trueno) y el Huoshenshan. El 23 de enero, los albañiles empezaron la construcción del Hospital Huoshenshan, con una capacidad de 1.000 camas.
«MISIÓN IMPOSIBLE» SE HACE POSIBLE
Las autoridades de salud chinas dijeron hoy domingo que recibieron reportes de 2.590 nuevos casos confirmados de infección por el nuevo coronavirus y de 45 muertes el sábado desde 31 regiones de nivel provincial y de los Cuerpos de Producción y Construcción de Xinjiang. Todos los decesos se presentaron en la provincia de Hubei, dijo la Comisión Nacional de Salud de China.
Mientras China pasa por los apuros del brote, las autoridades han decidido replicar el Hospital Xiaotangshan, un centro médico temporal en el suburbio norteño de Beijing construido en 2003. Beijing construyó el Hospital Xiaotangshan en sólo una semana para el tratamiento y control del SARS o síndrome respiratorio agudo severo.
Cuando Fang Xiang supo que él y su equipo tenían que terminar el hospital en Wuhan en 10 días, creyó que se trataba de una «misión imposible».
«Un proyecto de esta escala, generalmente requiere de al menos dos años», indicó Fang, gerente del proyecto de la Tercera Compañía de Construcción Ltd. del Tercer Buró de Ingeniería de Construcción de China. «Se requiere al menos un mes para construir un edificio provisional, sin mencionar un nuevo hospital para enfermedades infecciosas».
Además, con la participación de un gran número de trabajadores migrantes, es difícil proporcionar alimentos y albergue adecuados en el sitio, dijo un empleado del Buró de Construcción Urbana y Rural de Wuhan.
Sin embargo, la «misión imposible» tuvo que ser implementada bajo severas circunstancias.
Del 23 de enero al 1 de febrero, los casos confirmados de Wuhan de la infección aumentaron de 495 a una cifra impresionante de 4.109. Esto ha ejercido una enorme presión sobre las instalaciones médicas locales, que no cuentan con camas suficientes. Numerosos pacientes tuvieron que permanecer en casa para cuarentena y tratamiento. Si no son manejados apropiadamente, la epidemia podría exacerbarse.
Localizado en un sanatorio cerca del lago Zhiyin en el suroeste de Wuhan, el hospital está alejado de las áreas del centro, donde convergen las personas. El área tiene sistemas suficientes de transporte y de tuberías, y los comedores y dormitorios existentes están listos para proporcionar servicios.
Las autoridades dedicaron cinco horas al plan de diseño y crearon un proyecto de diseño en 24 horas. Tres compañías recibieron una orden de construir la «Montaña del Dios del Fuego» bajo la Tercera Compañía de Construcción Ltd. del Tercer Buró de Ingeniería de Construcción de China.
«Nunca he participado en una tarea tan urgente y nunca he visto a tantas compañías involucradas en un solo proyecto», dijo el colega de Fang Xiang, Shen Kai. «Es un trabajo arduo, pero necesitamos dar lo menor de nosotros».
Miles de trabajadores estuvieron operando más de 800 equipos simultáneamente cuando trabajaban contrarreloj para salvar vidas. Prometieron luchar contra el virus y trabajaron en turnos para completar la construcción. Algunas personas sólo durmieron cuatro horas al día, dijo Shen.
Ma Jiaqiang, de 47 años de edad, se ofreció de voluntario para el proyecto cuando leyó el anuncio de reclutamiento para el Hospital Huoshenshan en las redes sociales.
«He estado trabajando en Wuhan. Es mi hogar», dijo Ma. «Tenía que participar», añadió.
Ma operó una excavadora durante ocho horas al día en el sitio de construcción.
«Me siento honrado de poder participar en esto», indicó.
¡ANIMO CHINA!
Después de que empezó el trabajo en el hospital, el público chino se desviaba de su camino para supervisar la construcción de Huoshenshan.
La emisora estatal de China ha estado transmitiendo en vivo el avance de la construcción las 24 horas del día, lo cual se volvió viral instantáneamente. Sin narración ni música de fondo, los videos transmitidos en vivo proporcionan a la audiencia una vista de ojo de pájaro en tiempo real del sitio de construcción.
Autonombrándose «supervivientes en línea», internautas chinos han estado manteniendo una estrecha observación de los proyectos e intercambiando sus ideas y sentimientos en la sección de comentarios. Ellos expresaron su júbilo cuando el hospital fue entregado.
«¡Animo China! ¡Creo que podemos frenar la epidemia!», decía un comentario en línea típico.
«Saludos a los trabajadores que trabajan las 24 horas del día», dice otro comentario.
El proyecto está llevando esperanza a los pacientes como Zhang Yue, un residente de Wuhan, quien ha estado sufriendo fiebre durante días.
«Se siente como ver la luz del sol brillando a través de las nubes grises», dijo Zhang.