GINEBRA, SUIZA – El grupo de expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) suspendió temporalmente los ensayos clínicos de hidroxicloroquina contra el COVID-19, informó el director general del organismo, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
«El grupo ejecutivo anuncia una pausa temporal en los ensayos de hidroxicloroquina», dijo Ghebreyesus.
Los ensayos se interrumpieron para analizar los datos y determinar los beneficios y los efectos colaterales de los fármacos con hidroxicloroquina.
La seguridad de los medicamentos se debatirá en las próximas semanas en una reunión del grupo de monitoreo respectivo.
Hace dos meses la OMS lanzó los ensayos para estudiar la eficacia y la seguridad de cuatro fármacos y sus combinaciones en el tratamiento del COVID-19.
Más de 400 hospitales de 35 países participan en la iniciativa.
El 22 de mayo la revista médica The Lancet publicó un estudio que registra una tasa de mortalidad más alta en los pacientes con COVID-19 que tomaron cloroquina o hidroxicloroquina que en aquellos que no lo hicieron.
Además, según el estudio, no se confirmó el beneficio de esos fármacos como tratamiento para el COVID-19.
¿Qué es la hidroxicloroquina?
La hidroxicloroquina es un derivado de la cloroquina que se prescribe contra el lupus o la artritis reumatoide, y su fármaco de origen es empleado contra el paludismo, un parásito transmitido por el mosquito.
Este medicamento se dio a conocer como posible tratamiento efectivo ante el coronavirus cuando, desde finales de febrero, el profesor del Instituto y Hospital Universitario de enfermedades infecciosas de Marsella, al sur de Francia, Didier Raoult, lo difundió.
La hidroxicloroquina se convirtió en un tema de debate público que generó múltiples intercambios entre quienes respaldan su uso y quienes no lo hacen contra la pandemia.