El Acuerdo de Escazú es un tratado regional que promueve el derecho de acceder oportuna y efectivamente a la información ambiental, de participar en la toma de decisiones que afecten el ambiente y de acceder a la justicia para asegurar el cumplimiento de las leyes y derechos ambientales en los países de América Latina y el Caribe.
Además, este tratado aborda la protección de los defensores ambientales, un problema clave, considerando que en los últimos años hombres y mujeres en el mundo han sido asesinados por defender sus territorios ambientalmente. En cuanto al objetivo de este tratado internacional, establece estándares mínimos para garantizar los derechos de acceso a la información, participación pública y la justicia ambiental, y permitirá a los países de la región elevar los niveles de democracia, transparencia y rendición de cuentas en asuntos ambientales y de recursos naturales.
El Transitar hacia modelos más justos y sostenibles de desarrollo con la participación oportuna e informada de todos los sectores de la sociedad es fundamental para afrontar temas urgentes como es la crisis climática, la acidificación de los océanos, la erosión de los suelos y la pérdida de la biodiversidad.
Chile aún no firma este acuerdo y es imprescindible que lo haga, pues reduciría significativamente la desigualdad de género, ya que apuntan a los aspectos que la causan; nuestras sociedades demandan cada vez más y mejor acceso a información adecuada y confiable, así como más y mejores oportunidades para participar de manera significativa en las decisiones que les afectan. Hoy las zonas de sacrificio impactan de forma importante a sus habitantes, que buscan un desarrollo más igualitario y sostenible, donde éstos podrían acceder más fácilmente a la información de carácter ambiental, podrían mejorar su participación y tendrían una real justicia ambiental: la ratificación de este acuerdo reduciría aún más esta brecha.
Como siempre, el reloj avanza y pocos días quedan. Urge el llamado a nuestras autoridades a ratificar este importante acuerdo que expira impostergablemente el 26 de septiembre de este año.
LA OPINIÓN DE LA AUTORA NO COINCIDE NECESARIAMENTE CON LA DE LA RAZÓN
Por Jadille Mussa Castellano – Arquitecta del Paisaje y Ecóloga y Paisajista de la Universidad Central de Chile y Máster Internacional en políticas del trabajo y relaciones laborales de la Universitá di Bologna Italia, posee 17 años de experiencia nacional e internacional como consultor en paisajismo y turismo. Ex Directora de la Escuela de Arquitectura del Paisaje de la Universidad Central de Chile, es también profesora de la cátedra de legislación y gestión ambiental. Por cinco años fue la Encargada de Proyectos, Desarrollo y Prácticas Profesionales del Zoológico Nacional de Chile, del Ministerio de Vivienda y Urbanismo. Desde al año 2000, se ha desempeñado como diseñadora, coordinadora y ejecutora del Plan de Monitoreo Ambiental Medio Biológico Planta de Tratamiento La Farfana- Aguas Andinas – Aves Chile. Fue miembro del Staff Landscape Ecologist Dames & Moore Chile Ltda, entre 1994 y el 2000). Consultora de estudios de proyectos de desarrollo turístico URBE Arquitectos, realizando planes maestros de desarrollo urbano para las regiones XI, VI, V y IV.