- La dinámica de contagios a nivel nacional sigue siendo preocupante y con señales de empeoramiento, esta vez dominada por las cargas e índices de transmisión marcadamente altos en las regiones del sur.
- La trazabilidad a nivel nacional se ha mantenido estable, pero se observan disparidades entre regiones, lo que sugiere oportunidades de mejora.
SANTIAGO — El equipo ICOVID Chile, iniciativa liderada por la Universidad de Chile, la Pontificia Universidad Católica de Chile y la Universidad de Concepción, presentó su quinto informe con análisis y datos de las dimensiones propuestas para monitorear la pandemia en el país, con información obtenida hasta el domingo 6 de septiembre, proporcionada a través de un convenio con el Ministerio de Salud y el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación.
Según los datos de este último reporte, el indicador de trazabilidad «Proporción de casos notificados dentro de 48 horas de inicio de síntomas» ha mejorado paulatinamente desde mayo a la fecha, subiendo de 10% a 30-35% y manteniéndose estable en ese rango. Sin embargo, se lee en el informe, «se observan variaciones importantes entre regiones, en el rango de 20% a 40%. Estos niveles de variabilidad dan una indicación que es posible ir mejorando la trazabilidad en distintas zonas del país».
En esta línea, las y los investigadores de ICOVID Chile aseguran que para avanzar en trazabilidad «es necesario generar conciencia en la población, que al presentar síntomas debe acudir prontamente a algún centro de salud para hacer diagnóstico y determinar si es un caso sospechoso que requiere test PCR, en cuyo caso debe aislarse inmediatamente (no esperar el resultado del test para hacerlo)». El equipo ICOVID Chile está trabajando para generar indicadores de trazabilidad más específicos, que permitan identificar en mayor detalle dónde se requiere mejorar la cadena de trazabilidad.
Ana María Moraga, epidemióloga y jefa de la carrera de Medicina de la Universidad de Concepción, explica que «la situación nacional sigue siendo crítica, con alta carga y transmisión viral, a expensas particularmente de lo que ocurre en la zona centro sur, Maule, Biobío, Los Ríos y Magallanes. La capacidad hospitalaria en estas regiones, y además en la región de Coquimbo, se hace también critica, como lo fue en junio, pero esta vez con pacientes locales y no de la Región Metropolitana. La trazabilidad necesita
de manera urgente ser reforzada en atención primaria, y, de la misma manera, hacer que la población se haga partícipe del control de la pandemia a través de una mejor comunicación del riesgo».
En esta misma línea, Marcelo Olivares, académico de la Universidad de Chile, agregó que «a diferencia de lo sucedido en el peak de la pandemia en los meses de mayo y junio, ahora el aumento y foco de la carga infecciosa está fuera de la Región Metropolitana, lo que, debido al fuerte aumento de ocupación hospitalaria, ha generado que se comiencen a trasladar pacientes entre regiones. Esto es de suma urgencia ya que exige tener medidas de mitigación distintas para cada región que, de manera urgente, busque contener la movilidad que se puede generar en las fiestas patrias que se avecinan».
Respecto a la dinámica de contagios a nivel nacional, el reporte indica que el número de casos nuevos ha aumentado en relación a la semana pasada «de 10.74 a 12,28 nuevos casos en promedio por cada 100.000 habitantes. Así, este indicador de carga se mantiene en color rojo (fuera de control), como la semana pasada, pero alcanza niveles mayores y similares a los de los primeros días de mayo durante la fase creciente de la primera ola de la pandemia. A nivel regional, el indicador alcanza niveles rojos en todas las regiones. En particular, es preocupante la situación en las regiones de Arica y Parinacota (35.9), Atacama (16.9), El Maule (17,9), Biobío (21,1) y sobre todo, Magallanes (163,3)».
El quinto informe de ICOVID Chile da cuenta que «la dinámica de contagios a nivel nacional sigue siendo preocupante y con señales de empeoramiento, esta vez dominada por las cargas e índices de transmisión marcadamente altos en las regiones del sur. De manera especial y adversa, sobresalen las regiones del Maule, Biobío, y Magallanes. En los Ríos, si bien la carga de nuevos casos es menor que en otras regiones en términos absolutos, la transmisión es alta y amenazante, con posibilidades de convertir a la región en un nuevo foco. La existencia de -aún- pocos casos debería hacer posible una rápida contención con una efectiva y oportuna estrategia de trazabilidad y aislamiento. En el norte, Arica alcanza niveles muy altos tanto en carga como en transmisión. Finalmente, en la Región Metropolitana, si bien no hay evidencia clara de un rebrote, la situación sigue siendo inestable, con niveles altos, tanto en transmisión como en carga».
En esa línea, el experto en estadística y académico de la Universidad de Harvard, José Zubizarreta, sostiene que «los datos muestran que la pandemia vuelve a crecer, esta vez impulsada, principalmente, desde las regiones del sur. La situación es particularmente seria en las regiones del Maule, Biobío y Magallanes. La región de Los Ríos puede convertirse en un nuevo foco. A nivel nacional, por ahora, no hay evidencia clara de un rebrote, pero por primera vez se observan niveles tan altos de nuevos casos en el sur. En el resto del país, la situación es inestable (tanto los indicadores de carga como transmisión alcanzan niveles altos). Esto es clave dadas las dinámicas de movimiento poblacional que pueden generarse durante el mes de septiembre entre las regiones del sur y el resto del país».
En suma, señalan las expertas y expertos, «a nivel nacional se exhibe un claro aumento en los contagios, alcanzando niveles similares a los de los primeros días de mayo, cuando el país entraba en la primera ola de la pandemia, pero esta vez son principalmente las regiones del sur las que explican este crecimiento».
En cuanto a la dimensión de testeo, el reporte informa que la positividad del test a nivel país se mantiene en un valor similar a la semana anterior, con 6% de los test efectuados con resultado positivo. Sin embargo, hay regiones donde el indicador está empeorando, como las regiones de Maule y Magallanes, que aumentan su positividad semanal, de 6,1% a 7,6% en Maule, y de 20,5% a 24,6% en Magallanes. Las regiones de Valparaíso, O’Higgins, Araucanía y Los Ríos presentan discretos aumentos. Por otro lado, destacan positivamente las regiones de la zona norte como Tarapacá, Antofagasta, Atacama y Coquimbo que disminuyen la positividad.
En tanto, el informe enfatiza en que a nivel nacional se mantiene una buena capacidad de testeo, con 10,2 test por mil habitantes promedio semanal. En la última semana se observaron leves aumentos en Arica, Región Metropolitana, O’Higgins, Ñuble, Aysén y Magallanes.
Por su parte, en la dimensión capacidad hospitalaria del sistema de atención integrado se observa una tendencia al aumento en la ocupación de camas UCI llegando a 77% de ocupación a nivel nacional. «Preocupa la situación crítica de Magallanes con 93% de ocupación en la última semana y con tendencia sostenida al aumento y también situaciones críticas en las regiones de Araucanía (83%), Biobío (82%, en aumento) y Antofagasta y Valparaíso (81%)» alertan desde el equipo ICOVID Chile».
Más información sobre datos y el reporte completo en: http://www.icovidchile.cl/