SANTIAGO – En 2020, los llamados que denunciaron violencia intrafamiliar al Ministerio de la Mujer aumentaron 150%, respecto al año previo, mientras que en Carabineros los llamados se duplicaron, alcanzando un alza del 97%. De hecho, la policía uniformada recibe cada día alrededor de 500 llamados por motivo de este delito. Sin embargo, estas cifras no se están graficando en el nivel de denuncias formales, pues éstas disminuyeron en 7%. Esto podría indicar que las mujeres están pidiendo más ayuda, pero no están pudiendo generar la acusación.
Preocupado por esta tendencia y por otros eventuales casos de agresión que puedan darse entre miembros de una familia en tiempos de pandemia, es que el diputado de Renovación Nacional (RN) e integrante de la Comisión de Familia, Eduardo Durán, presentó un oficio al Ministerio de la Mujer y Equidad de Género preguntando por las medidas que han adoptado para ayudar a las víctimas de violencia intrafamiliar, especialmente durante la crisis sanitaria.
El congresista, además, solicitará una sesión especial en la Cámara Baja para abordar el tema. Esta reunión en que se invitará a la ministra del Ministerio de la Mujer, Mónica Zalaquett, tendrá el objetivo de abordar el proyecto que presentó el propio Eduardo Durán sobre elevar las penas durante la emergencia sanitaria con la idea es que el ministerio le ponga urgencia. La iniciativa modifica el código penal y la ley 20.066 sobre violencia intrafamiliar para establecer como circunstancia agravante de la responsabilidad penal el hecho de cometer el delito de lesiones y amenazas en contra de las personas señaladas en el artículo 5 de dicha ley, así como también el delito de maltrato habitual durante la vigencia de un estado de excepción constitucional como el que vivimos.
“Es sabido que cuando hay encierro las personas en algún punto se vuelven más irritables, y eso puede producir violencia y maltratos tanto psicológico como físico. Por eso, apuntamos a que en el caso que eso ocurra, es pertinente aumentar las sanciones para los agresores”, expresó Durán.
En otras de las propuestas del representante, se encuentra el uso de residencias para acoger a las mujeres que estén sufriendo algún tipo de violencia intrafamiliar.
“Como se crearon residencias sanitarias para el aislamiento de personas afectadas por el COVID-19, también se deberían habilitar residencias y casas de acogida para las víctimas de violencia intrafamiliar en plena pandemia. Muchas veces las personas no tienen dónde huir o a quién recurrir para pedir apoyo y es por eso mismo que también no efectúan las correspondientes denuncias en las policías o Ministerio Público. No cuentan con la asesoría o simplemente no se atreven”, afirmó el congresista.
Por último, en estas residencias para apoyar a las víctimas de agresiones y violencia, el parlamentario solicita que el Estado contrate personal del área salud adecuado para el acompañamiento y contención de las afectadas o afectados, ejemplo, psicólogos, terapeutas, entre otros.