Esta mañana, el Ejecutivo anunció su apoyo al Centro de Producción de Vacunas de la Universidad de Chile en Parque Carén a través de la creación de una comisión interministerial.
El proyecto está en la fase de estudios de ingeniería preinversional y cuenta con la participación de la farmacéutica italiana ReiThera, Italfarmaco, Rosiglioni Impianti y la Asociación Industrial de Laboratorios Farmacéuticos de Chile. También cuenta con respaldo de la Unión Europea y de entidades privadas y públicas.
SANTIAGO – Una comitiva de la Universidad de Chile liderada por su Rector, Ennio Vivaldi, llegó hasta el Salón O’Higgins de La Moneda para presentar el proyecto del Centro Productor de Vacunas y Productos Biofarmacéuticos de Carén ante una variada muestra del gabinete ministerial: los representantes de Ciencia, Economía, Obras Públicas, Relaciones Exteriores y Salud, además de la Corfo.
La reunión, que se extendió por una hora, terminó con buenas noticias para la casa de estudios, luego de que los ministros y ministras expresaran su respaldo al proyecto que busca devolverle al país la capacidad de producir sus propias vacunas y anunciaran la creación de una contraparte estatal para apoyar la iniciativa.
«Desde el Ministerio de Salud celebramos esta reunión porque para nosotros el tema de la soberanía y autosuficiencia sanitaria es clave. En este tiempo hemos aprendido algunas cosas en salud y tenemos que llevarlas a la práctica, y una de esas cosas es que debemos tener respuestas universales para los problemas de la población, como es la pandemia. Esas soluciones tenemos que hacerlas y responder colectivamente. Estrategias como esta son consistentes con la mirada que desde Salud tenemos para resolver los problemas regionales», dijo la ministra Begoña Yarza.
Por su parte, el titular de Ciencia anunció que se creará una comisión interministerial que va a ser contraparte de este proyecto «para establecer los instrumentos con los que el Estado va a impulsar» la iniciativa. «Una visión integral requiere la asociatividad de la academia y un fuerte impulso desde el Estado y eso es lo que estamos hoy día modelando: cuál va a ser nuestra participación. Desde el punto de vista de la necesidad y la justificación, Chile necesita dar un salto y recuperar capacidades que tuvo», dijo. También destacó que el ejemplo de Parque Carén «sirve como un modelo para replicar en otros proyectos de trascendencia nacional como el hidrógeno verde y temas de datos».
«Esta es una muy buena noticia para el país. El Centro de Vacunas en Carén ejemplifica de manera perfecta la visión de la Universidad de Chile con respecto a cómo debemos abordar los desafíos del presente y del futuro: de forma transdisciplinaria, con participación pública –tanto Gobierno como instituciones de educación estatales– y privada para aunar esfuerzos e impulsar al país al desarrollo», señaló el Rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi.
La delegación de la Universidad estuvo compuesta además por Enrique Aliste, Vicerrector de Investigación y Desarrollo; Carlos Saffie, Director de Innovación y encargado de hacer la presentación de los detalles del centro; Heidi Berner, Vicerrectora de Asuntos Económicos; y Valerio Branchi, Director de Negocios y Operaciones Regional de Rosiglioni Impianti.
En cuanto a la contraparte gubernamental, asistieron a la reunión los ministros de Ciencia y Tecnología, Flavio Salazar; Economía, Nicolás Grau; Obras Públicas, Juan Carlos García; Relaciones Exteriores, Antonia Urrejola; y Salud, María Begoña Yarza; además de la subsecretaria de Economía, Javiera Petersen, y el vicepresidente de la Corfo, José Miguel Benavente.
El Centro de Vacunas
El proyecto consiste en una planta multipropósito con capacidad para producir 100 millones de dosis anuales de hasta 5 productos biofarmacéuticos distintos, con más de 7000 m2 de superficie. La iniciativa se encuentra en la fase de estudios de ingeniería preinversional y considera la participación de aliados como Rosiglioni Impianti en la coordinación global, Cytiva (Filial de General Electric), la constructora Nordika y la biofarmacéutica italiana ReiThera, que será el primer socio-cliente del centro. También existe un acuerdo con la Asociación Industrial de Laboratorios Farmacéuticos de Chile (ASILFA).
«Hace cerca de un año, la Universidad de Chile firmó un convenio de colaboración para la investigación científica, diseño de planta y estudios clínicos con la empresa italiana ReiThera, con Italfarmaco y con Rosiglioni Impianti. Esto nos ha permitido seguir colaborando en el diseño de la planta y avanzar en el trabajo de estudio de ingeniería, el modelo de operación del centro, así como también en la parte de transferencia tecnológica. ReiThera va a poner a disposición del centro su plataforma de producción de vacuna adenoviral para que investiguemos no solo las vacunas COVID, sino para otras enfermedades emergentes o que están presentes», explicó el director de Innovación de U. de Chile, Carlos Saffie.
ReiThera es una compañía público-privada que tiene un 33% de participación estatal está desarrollando una fórmula contra el COVID-19 que ha obtenido excelentes resultados preclínicos y clínicos en Fase I y II, y ha mostrado una fuerte inmunogenicidad como dosis de refuerzo en esquemas de vacunación heterólogos. En noviembre pasado, ReiThera obtuvo la beca de la Fundación Bill y Melinda Gates (USD$1.4 millones) para el desarrollo de su vacuna, que genera expectación en el mercado biofarmacéutico.
Tras la reunión, el plan es que el Ministerio de Ciencia lidere una mesa intersectorial donde los equipos de gobierno trabajen en conjunto con los de la Universidad de Chile para estructurar desde el punto de vista corporativo el proyecto y darle agilidad en lo que respecta a permisología.
Adicionalmente, la ministra de Salud destacó que «este es el inicio de un camino para la construcción de vacunas» y que «Latinoamérica no solo tiene que hacer vacunas para el COVID, sino que también productos biológicos en nuestra región». Anteriormente en la semana, la ministra Yarza había participado de la IV Reunión Extraordinaria de Ministros de Salud del Mercado Común del Sur (Mercosur), que reúne a Argentina, Uruguay, Brasil y Paraguay y donde Chile participa como Estado asociado. En ella, abordaron la «capacidad productiva de vacunas» de la región y de la necesidad de «asegurar la soberanía regional» en esta materia.