SANTIAGO – Fitch Ratings observa que lo aprobado por la Convención Constitucional podría limitar y reducir los niveles de operación y ocupación del segmento de prestadores privados de salud, y probablemente eliminar sus negocios bajo el formato de Institución de Salud Previsional (Isapre) con el que operan hoy. Sin embargo, la agencia no ve un impacto inmediato en las clasificaciones de los emisores que clasifica en la industria de la salud si se aprueba la nueva Constitución en el plebiscito de salida del 4 de septiembre de este año.
Dentro de las normas que ya son parte de la versión inicial de la nueva Constitución, que son relevantes en la evaluación dado su impacto potencial en el desempeño financiero de la industria figuran:
–El sistema estará integrado por prestadores de salud públicos y privados.
–Es deber del Estado velar por el fortalecimiento y desarrollo de las instituciones públicas de salud.
–Las cotizaciones que pagan los empleadores o trabajadores independientes y que actualmente pueden ir al sistema de administración pública como es el Fondo Nacional de Salud (Fonasa) o de administración privada como son las Isapres, solo podrán utilizarse para «aportar solidariamente al financiamiento» de un sistema nacional de salud que será público. Es decir, ya no habrá libertad de elección entre una aseguradora de salud pública y una privada, pues estos fondos serán administrados por un organismo público.
Lo aprobado por el Pleno de la Convención Constitucional introduce cambios relevantes al funcionamiento del sistema de salud, lo que impactará en distinta medida a los operadores de la industria y al mismo tiempo tendrá un gran impacto en la población, en particular, en los afiliados al sistema de Isapre. Sin embargo, se descartó el requisito de que los prestadores privados tuvieran que ser sin fines de lucro para integrarse al sistema nacional de salud, lo que hubiera profundizado aún más un cambio en la industria, excluyendo la posibilidad de que las clínicas privadas dieran acceso a servicios de salud a cualquier afiliado que cotizara solo en el servicio público.
Fitch clasifica cuatro operadores en la industria de la salud en Chile; dos de ellos operan bajo un modelo que integra el segmento de prestación de salud, así como el segmento asegurador: Banmédica S.A. (Banmédica) [AA(cl) Perspectiva Estable] y Bupa Chile S.A. (Bupa Chile) [AA(cl) Perspectiva Estable]. Ambas compañías son actualmente controladas en un 100% por grandes grupos internacionales del sector salud; UnitedHealth Group Incorporated (A Perspectiva Estable) y Bupa Finance Plc (A- Perspectiva Estable), respectivamente. Además, Fitch clasifica otras dos compañías que operan exclusivamente en el área de prestaciones de salud: Empresas Red Salud S.A. (RedSalud) [A(cl) Perspectiva Estable] e Instituto de Diagnóstico S.A. (Indisa) [A+(cl) Perspectiva Estable].
Seguros de Salud
Como se puede desprender del actual texto de la nueva Constitución, desaparecerán las Isapres como operadores de seguros de salud ligados a las cotizaciones obligatorias de los trabajadores. En el nuevo sistema propuesto, dichas cotizaciones obligatorias de salud serán administradas exclusivamente por una entidad pública. Actualmente, hay 15 millones de beneficiarios en la red de seguros pública de salud (Fonasa) con aproximadamente nueve millones de afiliados o cotizantes. El sistema de Isapre está compuesto por seis compañías abiertas a cualquier cotizante: Colmena Golden Cross S.A. (Colmena), Cruz Blanca S.A. (perteneciente a Bupa Chile), Nueva Masvida S.A., Consalud S.A., Vida Tres S.A. y Banmédica S.A. (estas dos últimas pertenecientes a Banmédica); y tres exclusivas para funcionarios de empresas específicas: Isalud Ltda. (para empleados de Codelco), Fundación (para empleados de Banco Estado) y Cruz del Norte Ltda. (para empleados de SQM). En total, las Isapres alcanzan 3,3 millones de beneficiarios con dos millones de afiliados.
Las compañías dueñas de las Isapres en Chile habían venido desarrollando paralelamente un segmento de seguros de vida para participar en el área de seguros de salud privada, el que funciona como complemento a la cobertura que representan las Isapres o Fonasa, en algunos casos. Es así como Banmédica, Bupa Chile y Colmena participan de este negocio a través de sus compañías Help Seguros de Vida S.A. [AA-(cl) Perspectiva Estable], Bupa Compañía de Seguros de Vida S.A. [A-(cl) Perspectiva Estable] y Colmena Compañía de Seguros de Vida S.A. [BBB+(cl) Perspectiva Positiva].
Fitch observa que serán estas compañías de seguro la alternativa que tendrán los grupos para seguir participando del negocio de seguros de salud. Estas competirán por retener a aquellos afiliados que tengan la capacidad de pago para contratar seguros privados de salud adicionales a las cotizaciones obligatorias que realizan sus empleadores o los mismos trabajadores independientes. Fitch ve que este negocio, si bien sería inicialmente más reducido en número de afiliados en comparación con el negocio actual, presentaría una presión normativa menor y probablemente menos volatilidad. Actualmente el mercado de los seguros de salud alcanza CLP670 mil millones, frente a los CLP3.168 mil millones de las cotizaciones en Isapres y aproximadamente CLP2.731 mil millones de cotización en Fonasa. El margen bruto del segmento de seguros de salud es de aproximadamente 21%, frente a un promedio de 12% en las Isapres los últimos cinco años.
El negocio actual de las Isapres en Chile ha mostrado una gran volatilidad en sus resultados y la participación de este segmento en el EBITDA consolidado de las empresas del sector salud, como Banmédica y Bupa Chile, ha oscilado entre ser negativo y 20% en los últimos cinco años. Fitch proyecta que incluso en un escenario de continuidad del negocio con la estructura actual, este segmento seguirá disminuyendo su participación en los resultados consolidados de estos emisores, ya que estos grupos se están enfocando en crecer en el segmento de prestación de servicios de salud y en el extranjero. Banmédica ha crecido en Perú y Colombia, operaciones que representan más de 50% del EBITDA consolidado.
Proveedores de Servicios de Salud
En el segmento de los proveedores de servicios de salud privada, tanto las clínicas como los servicios ambulatorios podrán, bajo el esquema aprobado, seguir atendiendo a los abonados del servicio público de salud. Sin embargo, enfrentarán el desafío de mantener sus actuales niveles de ocupación y operación. Parte del universo que hasta hoy se mantiene afiliado a las Isapres y se atiende en el sistema privado de salud, no tendrá capacidad de pago para acceder a seguros complementarios que mejor cubran su acceso al sistema privado. Posiblemente, también será limitado el número de afiliados que, sin contratar seguros complementarios, cuente con capacidad de pago para atenderse ocasionalmente en el servicio de salud privado y que asuma las diferencias de costos.
En la actualidad, aproximadamente un tercio de los ingresos de los prestadores de salud privados proviene de pacientes del sistema público de salud, con un mayor componente en los servicios ambulatorios y en las clínicas ubicadas en zonas de menores ingresos. Además, aproximadamente un tercio de los cotizantes de las Isapres solo paga el mínimo obligatorio, los que probablemente no financiarán un seguro complementario adicional. Los prestadores privados de salud deberán aumentar sus esfuerzos para mantener a sus clientes que posiblemente tendrán menos cobertura de seguros, en un escenario en que el gobierno debiera fortalecer y desarrollar las instituciones de salud pública, según el mandato de la nueva Constitución.