La Sala despachó el texto legal que tuvo su origen en una moción de los senadores Ximena Rincón, Pedro Araya, Iván Flores y Matías Walker.
Por 41 votos a favor, 2 en contra y 1 abstención, la Sala del Senado respaldó en general y particular, el proyecto que reduce y uniforma en 4/7 el quórum necesario para modificar la Carta Fundamental, con lo cual quedó en condiciones de cumplir su segundo trámite, en la Cámara de Diputadas y Diputados.
En la segunda jornada de análisis y votación de la iniciativa que busca terminar con los quórum supra mayoritarios de 2/3 y 3/5 para cambiar la Carta Fundamental, la Sala sometió a votación el texto legal que tuvo su origen en una moción de los senadores Ximena Rincón, Pedro Araya, Iván Flores y Matías Walker.
Durante el amplio debate quedaron de manifiesto las distintas posturas respecto a la continuidad y el futuro del proceso Constituyente, el próximo plebiscito del 4 de septiembre y la necesidad de contar con nuevos entendimientos. En esa línea, los autores de la moción insistieron en el argumento de generar una fórmula -con realismo político- que permita llevar adelante las demandas de la ciudadanía.
Asisimismo, la oposición consideró importante «dar señales concretas respecto a la voluntad política de terminar con la Constitución de 1980» y abrir una nueva etapa de la mano del compromiso de las nuevas generaciones de sus directivas políticas. Por su parte, quienes intervinieron en contra de la reforma constitucional para rebajar los quórums recalcaron que «este proyecto es funcional a la opción del Rechazo en el Plebiscito»
En la oportunidad, también se sometió a votación unas indicaciones patrocinadas por el senador Rojo Edwards que apuntaban a mantener el quórum de los 2/3, “en 6 de los artículos de la Constitución que se refieren a derechos y libertades de las personas”. No obstante, fueron rechazadas por 37 votos en contra, 2 a favor y 2 abstenciones.
En la última votación se sometió a consideración el texto aprobado por la Comisión de Constitución respecto al numeral 2 del proyecto, el cual se aprobó por mayoría: “Si el Presidente observare parcialmente un proyecto de reforma aprobado por ambas Cámaras, las observaciones se entenderán aprobadas con el voto conforme de las cuatro séptimas partes de los miembros en ejercicio de cada Cámara y se devolverá al Presidente para su promulgación.”
“La semana pasada expliqué el contexto en que se presentó esta iniciativa, los desafíos de cara al plebiscito y las razones que me llevaron a suscribir este proyecto… Respaldo esta reforma no, para enmascarar el rechazo, sino por realismo político para continuar el proceso constitucional”.
“La reforma constitucional es relevante pues es la muestra más clara que existe voluntad para llevar adelante un entendimiento y dar continuidad al proceso constitucional. Valoro que se haya avanzado sin poner trabas a esta iniciativa y quiero aclarar: no es efectivo que la UDI se haya opuesto a cambios constitucionales, por el contrario, siempre hemos estado por un entendimiento constitucional forjado en base a acuerdos”.
“Lo que estamos haciendo hoy es, justamente, dar certeza, seguridad a los chilenos que queremos una nueva y buena Constitución y no la que ha propuesto la Convención Constitucional, que no dio el ancho, que no fue capaz de construir una casa para todos y que sigue dividiendo a los chilenos”.
“Quiero razonar el por qué he votado a favor. El Presidente habló y lo hemos escuchado, es más hizo una propuesta y cambió el escenario, ya que en el “muy hipotético caso” que gane el rechazo, corresponde reiniciar el proceso constituyente y, en esa condición, una baja de quórum va a facilitar el camino”.
“Hemos presenciado un milagro: los que por 30 años se negaron a los cambios y a bajar los quórum de la Constitución del 80, hoy día lo han hecho por obra de la propuesta de la nueva Constitución (…), pero quiero denunciar que se presente en este minuto, para darle viabilidad política al rechazo”.
“Es lamentable esta división, por eso espero que este proceso se zanje lo antes posible, porque veo un país dividido (…). Es la ciudadanía la que va a trazar el camino (…) Siempre he creído que los supra quórums son una atadura para los cambios, que atrincheran el poder. Quiero agradecer al presidente Boric, porque dio la orden y liberó a los parlamentarios (…)”.
“Esto que estamos votando hoy -que rebaja rigideces y mega candados de la Constitución del 80- permite que comencemos a pavimentar un camino de mayorías, ir construyendo acuerdos, porque tenemos en nuestras manos tareas que tienen que ver con las convicciones democráticas y la adhesión del perfeccionamiento de la democracia”.
“Hay desconfianzas de lado y lado pero deben surgir grandes acuerdos. La votación histórica de hoy da cuenta de ello. Esto no viene de la derecha sino desde la DC. Este proyecto es la llave maestra para una nueva Constitución. Agradezco también la moción presentada por colegas”.
“Voy a votar apruebo luego de una reflexión larga y difícil. Hay cosas que creo que se pueden mejorar. Este proyecto se antepone a una situación que puede ocurrir como es que el rechazo pueda ganar. Creo que es adecuada la rebaja de quórum. No siento que este proyecto le da agua al molino del rechazo”.
“El Gobierno se ha opuesto a que se vote este proyecto. El Presidente de la República se ha transformado en jefe de campaña del Apruebo. Las volteretas del Gobierno y Apruebo Dignidad son pan de cada día. Votar apruebo es quedarse con los cerrojos, votar rechazo es darnos la posibilidad de tener una nueva Constitución”.
“Si triunfa el apruebo, hay un espacio para hacer correcciones, y si gana el rechazo, con mayor razón si ya la ciudadanía decidió cambiar la Constitución. Las buenas constituciones son las que unen. Esta reforma permitirá mejorar la Constitución pero con participación”.
“Pareciera ser que se olvida de dónde salió el proceso constituyente. Hubo una revuelta popular brutal. El presidente Boric se pronunció diciendo que solo hay dos opciones y si el rechazo gana, el proceso constituyente elegido democráticamente, debe seguir. Eso nos hizo reflexionar respecto a este proyecto”.
Senador Enrique Van Rysselberghe
“En el escenario de un rechazo no significa que tengamos que mantenernos con actual Constitución sino que debemos responder a una demanda que la ciudadnía entregó en ocubre de 2020. Chile necesita una hoja de ruta para continuar con el proceso constituyente pero es necesario aclarar que no compartimos la fórmula de una nueva Convención solo el objetivo de redactar una nueva Carta Magna”.
“El desafío es formar las alianzas necesarias para que este proceso persista y el corazón de esta iniciativa es abrir los caminos a una nueva y mejor Constitución. Varias propuestas de la Convención son buenas al igual que la propuesta realizada durante el gobierno de la presidenta Bachelet. Mi llamado es no caer en la desesperanza el proceso debe continuar”.
“Queremos estar comprometidos a que habrá una nueva Constitución. Nosotros, los políticos representamos a la gente y tenemos que dar respuesta a sus demandas y llegar a una Constitución que nos una…Tengo pena porque nos farreamos una tremenda oportunidad y eso no fue culpa de los senadores”.
“Yo represento a aquellas personas que no quisimos hacer los cambios durante 30 años y ahora quiero que me pasen la cuenta porque ahora estoy por los cambios y estoy dando una señal de compromiso. Y lo hago para respaldar a los jóvenes de nuestra dirigencia que tienen una visión distinta. Qué decidan los chilenos”.
Senador Francisco Huenchumilla
“Desde un comienzo no estuve de acuerdo con este proyecto y tengo discrepancias sobre el sentido de este proyecto de rebaja de los quórums. Creo que está diseñado para favorecer el rechazo pero me pregunto: ¿en qué circunstancias se aplicarían los 4/7?, solo si gana la opción del rechazo”.
“Que existan los quórums no es raro, ni es contra democrático; al contrario, es una protección que siempre tienen las minorías, respecto de las mayorías a nivel constitucional y ¿qué es la Constitución?, es la herramienta de control del poder de las mayorías y, por lo tanto, en temas importantes es razonable que tengan quórums”.
“Quiero suscribir gran parte del análisis que hace el senador Huenchumilla y quiero decir que el país, efectivamente, está dividido y no es por la propuesta de nueva Constitución, sino que lo está desde el golpe militar (…) porque no hemos podido cerrar esos capítulos. (…) Voy a votar a favor porque siempre hemos estado por quórums más bajos que nos permitan hacer las constituciones más dinámicas. Esto no relativiza en nada el plebiscito del 4 de septiembre”.
“He tratado de ser coherente y mantener una sola línea (…) No hay que confundir 4/7 con 4 de septiembre, porque es un error hacer de esta discusión una revisión del texto constitucional, en eso los autores siempre lo han planteado. Es equívoco sostener que la aprobación de este proyecto solo le sirve al Rechazo”.
“En lo personal estoy incómodo y contrariado, porque hubiese querido en otro escenario estar en esta rebaja de quórum y no en este momento, en el sentido que 4/7 tiene un uso claro y concreto… eso atenta cuando uno ha intentado mantener consecuencia y coherencia (…). Ésta rebaja pretende colocarse en un escenario, hubo algún animo de trampa en algunos”.
“Hoy tenemos otro Senado, con otra histona de vida, que no es la que pasó hace 50 años atrás, cuando se quebró la democracia (…) Uno dice: ¿por qué si somos 50 senadores, no somos capaces de sentarnos a conversar para buscar lo mejor para Chile?”.
“Es insólito que se llame a aprobar una nueva Constitución bajo el argumento que debe ser objeto de profundas reformas. Tenemos que asumir que la Convención Constitucional no hizo bien su trabajo, fue un fracaso y su resultado es, a lo menos, pobre y cuestionable. Chile necesita mucho más y en ese marco es necesario mayor flexibilidad de quórum”.
“El estallido social fue una señal del malestar social y eso se institucionalizó a través del Acuerdo por la Paz pero son los chilenos y chilenas quienes se pronunciaron por amplia mayoría en el plebiscito de entrada. Queremos superar un pacto social y político que no corresponde a la realidad que vivimos y creo que deben existir las posibilidades para que la política se siga reivindicando”.
“El motivo de esta discusión es aprobar una norma para modificar la Constitución que está a punto de morir y creo que eso hay que explicarlo. Lo más valioso de esta discusión son los errores que se han reconocido de un lado y otro. ¿Qué salidas tenemos en caso de un resultado estrecho o si se pierde el Apruebo? Por eso me parece bien que cambiemos los quórums.
“Voté Apruebo en el Plebiscito de 2020 porque creo en una nueva forma de hacer política y porque la Constitución actual no cumple con las expectativas de la ciudadanía. Al igual que muchos fundé mis esperanzas en la nueva Constitución pero me desilusionó el proceso. Creo -con convicción- que tenemos que generar acuerdos y no profundizar las divisiones”.
“No todo ha sido tan malo en las últimas décadas. Se ha logrado mejorar la calidad de vida de miles de chilenos, pero también hay que entender que la actual realidad nos lleva a buscar nuevos acuerdos y mecanismos que nos rijan. Este proyecto permite lograr acuerdos pero con mayor amplitud”.
“Quiero valorar esta reforma. Esta tensión en las Constituciones es normal porque por un lado, hay que generar certezas jurídicas y que no se transforme en rigideces. No hay una regla de oro sobre la materia, y me parece razonable la cifra de 4/7 en los quórums”.