ANTOFAGASTA – Una nueva causa de la Región de Atacama fue presentada y admitida a trámite por el Primer Tribunal Ambiental. Se trata de una reclamación de la empresa Atacama Kozan contra la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) por el rechazo de su Programa de Cumplimiento (PdC).
Entre los argumentos de la empresa para interponer la reclamación está el hecho de haber presentado todos los documentos requeridos por el organismo fiscalizador. «La formulación de cargos por parte de la SMA dio lugar a un conjunto de iteraciones que finalmente, en virtud de la colaboración activa y proactiva de SCM Atacama Kozan, significaron la entrega de más de 40 documentos (entre los que destaca la existencia de informes técnicos, de monitoreo, programas de trabajo y reportes, entre otros) en 7 distintas oportunidades».
Para la compañía minera no se justifican los argumentos de rechazo e insisten en haber trabajado «activamente y en cooperación con la SMA desde la presentación del primer PdC en mayo de 2021» y aseguran que el único aspecto del Programa de Cumplimiento que fue reparado por el organismo fiscalizador fue el cumplimiento del criterio de eficacia de las acciones propuestas para el cargo Nº5 respecto a la implementación parcial del sistema de monitoreo y control de infiltraciones asociados a tranque de relaves del proyecto. «No se cuestionó la integridad, eficacia y verificabilidad de las otras 31 acciones ofrecidas respecto a los demás cargos».
PdC
El PdC fue propuesto por la empresa fue presentado debido al incumplimiento de nueve compromisos ambientales adquiridos para la aprobación del proyecto. De dichos incumplimientos uno fue calificado como gravísimo, cinco graves tres leves lo que podría significar para la empresa una multa de hasta 38.000 Unidades Tributarias Mensuales (UTA), revocación de la RCA o clausura del proyecto.
Proyecto
El proyecto consiste en la explotación subterránea de un yacimiento minero y cuprífero ubicado en el Valle de Copiapó, la instalación de una planta de tratamiento del mineral que incluye chancado, molienda, flotación y el depósito de los relaves en un tranque ubicado en la Quebrada el Gato en Copiapó.