Columna de Higinio Espergue | “Nos interesa continuar contribuyendo a la memoria de nuestro país vinculada al presente, verdad, justicia y garantías de no repetición”

Para la Corporación Memoria Borgoño, la conmemoración de los 50 años es un hito importante, de profunda reflexión sobre el proceso de transformaciones económicas, políticas y sociales que fue interrumpido a sangre y fuego por él complot fraguado por el gran empresariado, sus partidos de derecha y el gobierno de EEUU de la época.

El gobierno del presidente Allende, fue un gobierno legítimo y democrático, que buscó implementar cambios dentro del marco institucional. Por lo tanto la experiencia histórica demuestra que el gran empresariado y los partidos de derecha, carecen de vocación democrática y soberana, jamás han promovido una cultura de respeto a los derechos humanos, así lo refleja su conducta política, para impedir que asumiera la Presidencia el Dr. Salvador Allende, cuando el 25 de octubre de 1970 asesinaron al General Rene Schneider, posteriormente cuando asume Allende, fomentan el sabotaje económico y atentados terroristas, acompañados de una campaña mediática junto a paros de camioneros financiados por EEUU.

La orden era derrocar al gobierno, por esta razón adelantaron el golpe de Estado, para impedir el llamado a plebiscito que realizaría el Gobierno democrático.

Para nuestra Corporación es importante valorar ese periodo histórico, donde se manifestó la mayor participación y protagonismo social, un proceso que iba en aumento, concretamente en las elecciones de marzo de 1973 la Unidad Popular obtuvo el 43 % de los votos, en un contexto desfavorable de aumento del desabastecimiento producto del sabotaje a la economía. Por cierto, que el periodo de la Unidad Popular debe ser analizado de manera autocrítica, por ejemplo, como haber enfrentado y derrotado la ofensiva y conspiración.

Para la Corporación Memoria Borgoño, es fundamental contribuir a la memoria y a la verdad histórica de lo acontecido durante un periodo de la historia de Chile, y a la vez reconocer y rendir homenaje a un hombre digno, consecuente, que debe ser horado por esta y las generaciones futuras.

De igual forma en el marco de los 50 años, nos interesa condenar totalmente el golpe de Estado y el genocidio contra el pueblo, desarrollado por la dictadura cívico-militar.

En segundo lugar, sobre el terrorismo de Estado y genocidio que durante 17 años se vivió en Chile, es importante no olvidar que la dictadura y sus cómplices civiles siempre negaron la existencia de detenidos y detenidas desaparecidos, los secuestros, tortura, falsos enfrentamientos y atentados, entre otros el asesinato del General Prats y su esposa.

El montaje criminal de los 119 hombres y mujeres, lo sucedido con Marta Ugarte, son evidencias de la brutalidad, que ayer se negó y encubrió con pactos de silencios y que hoy todavía persiste.

La evidencia de lo sucedido está ahí, no obstante, la derecha y los cómplices civiles, apoyados en su poder económico y control hegemónico de los medios de comunicación, se esfuerzan por negar la historia y ocultar la verdad.

Nuestra Corporación, en el marco de los 50 años, más allá de esta conmemoración histórica, nos interesa continuar contribuyendo a la memoria de nuestro país vinculada al presente, verdad, justicia y garantías de no repetición, solo por esa vía se podrá ir construyendo una sociedad más democrática y civilizada, que sea capaz de resolver los naturales conflictos sociales y políticos en forma democrática y pacífica.